El informe regional de una consultora brasileña indicó que el 34 por ciento de quienes renunciaron a un abono durante 2023, lo hizo por razones económicas.

No hace mucho que Bariloche fue epicentro de una pequeña conmoción al rodarse en diversos puntos de la ciudad una producción para Netflix, pero más allá de la fascinación ante el despliegue cinematográfico y la presencia en la ciudad de un elenco de renombre, el 34 por ciento de los usuarios argentinos que dieron de baja servicios de streaming durante el último año argumentó razones económicas para hacerlo. Muy probablemente, durante el primer trimestre del fatídico 2024 se profundice la tendencia.

En las últimas horas comenzó a circular el informe “Consumo de streaming en América Latina 2024”, que realizó durante enero último Sherlock Comunicaciones, una empresa de relaciones públicas con sede en San Pablo (Brasil). Según el estudio, algo más de seis de cada 10 argentinos considera que un abono a un servicio de streaming se tornó “muy caro”, valoración que explica que cada vez más se compartan entre amigos o familiares.

El estudio de la consultora se practicó sobre 3.372 personas y también incluyó a Brasil, Chile, Colombia, México y Perú. Como consecuencia del encarecimiento, proliferan metodologías ilegales para acceder a los contenidos sin desembolsar pesos. Lidera el ranking compartir contraseñas entre varios domicilios, a pesar de los intentos que hacen las empresas para controlar esa práctica.

En efecto, el 46 por ciento de los usuarios argentinos y argentinas admitió compartir suscripciones con gente cercana para esquivar el peso de los incrementos. Por otro lado, y con el mismo objetivo, el 29 por ciento de los consultados en el país reconoció que disfrutó de las pruebas gratuitas de 7 días para darse de baja al finalizar la promoción. No obstante, no sólo la cuestión económica es la que incide en la merma del streaming.

Ocurre que tres de cada 10 encuestados en la Argentina consideraron “aburridos” y “repetitivos” los contenidos que ofrecen las plataformas. En términos regionales, siete de cada 10 encuestados, es decir el 69 por ciento, afirmaron que las producciones sobre Latinoamérica recaen en los estigmas de “la droga”, “la delincuencia”, “la violencia” y “los estereotipos sexuales”. Bodrios, bah…

Pero existe otro ingrediente llamativo para tener en cuenta: usuarias y usuarias ya no prestan tanta atención a los contenidos como un par de años atrás. En efecto, el consumo de series y películas en plataformas ya se parece al de la radio o la TV tradicional: sólo el 24 por ciento de la gente consultada aseguró que presta atención completa a la producción que, en teoría, está viendo. En 2021, ese porcentaje significaba el 46 por ciento.

En buen romance, cada vez se presta menos atención a los contenidos de las plataformas. En Argentina, el 70 por ciento de las personas encuestadas reconoció realizar otra actividad mientras mira películas o series, entre ellas, “cocinar”, “ordenar la casa” y “chatear con amigos o familiares”. Apenas el 28 por ciento de la gente que se consultó en el país aseguró que concentra toda su atención en lo que está viendo.

Más o menos en sintonía con el resto de la región, el 27 por ciento de quienes respondieron la encuesta señaló que consume entre dos y tres horas diarias de plataformas digitales por día. En cuanto al contenido, el 50 por ciento declaró series y películas, mientras que el 20 por ciento se inclinó por música. A pesar de las disminuciones, la que estuvo presente en Bariloche sigue encabezando las preferencias: el 61 por ciento de la gente señaló que prefiere Netflix, si tuviera que quedarse con solo una.