05/08/2019

Creados para la grandeza

Creados para la grandeza

 

Mucha gente se resigna a vivir una vida “a medias” en todo sentido, cuando en realidad todos fuimos creados para experimentar la grandeza en cada área que pisamos. Me permito preguntar: ¿Por qué nos autolimitamos constantemente cuando, si reconocemos nuestro potencial ilimitado, podemos soltar capacidades que nos lleven a vivir en plenitud?

Si nos fijamos metas, objetivos, proyectos o sueños por alcanzar, será muy difícil lograrlos si no tenemos una autoestima sana. Por lo general, para alguien con baja estima su vida funciona siempre en un nivel donde no hay resultados positivos. ¿Por qué? Porque no se cree merecedor/merecedora de nada bueno e inconscientemente, sin darse cuenta, boicotea situaciones que surgen a su favor.

Ahora, ¿qué es la autoestima? Es la calificación que cada persona se da a sí misma y deriva de la manera en que se percibe. ¿Cómo te ves a vos mismo, a vos misma? ¿Cómo capaz, fuerte, inteligente e invencible? ¿O como incapaz, débil y fácil de derribar por las circunstancias adversas? Debés saber que lo que vos creas, eso es lo que te ocurrirá.

Pero aun si somos adultos y hemos vivido toda la vida con un bajo grado de satisfacción con nosotros mismos, nunca es demasiado tarde para comenzar a amarnos de forma equilibrada, a valorarnos como los seres humanos maravillosos que somos y recuperar así nuestra autoconfianza. Cuando vamos por la vida con una estima sana, ya nadie puede herirnos a nivel emocional ni robarnos nuestros sueños porque funcionamos con seguridad interior y todo lo que hacemos nos sale bien, aunque exista a veces algún tropiezo.

Pensar: “Yo no valgo nada” (porque ese fue el mensaje que nos transmitieron desde la infancia) en algunos casos, solo nos debilita y nos hace concentrar en hechos sin importancia, en lugar de poner nuestro foco en los proyectos importantes que tenemos por delante. El dolor emocional, causado por heridas que permitimos que otros nos produzcan, nos anula como personas pues desdibuja nuestra grandeza, nuestro potencial y nuestro verdadero valor.

Muchos, al ver que pareciera que a los demás todo les resulta fácil, expresan: “¿Y cuándo me va a tocar a mí?”. Lo cierto es que existen ciertos principios para alcanzar el éxito que todos podemos aplicar en nuestra vida. Uno de ellos es aprender a hablar en positivo. Los exitosos hablan palabras tales como crecimiento, multiplicación, mejora continua, autosuperación, avance y otras similares. ¿Te has detenido a pensar cómo es tu hablar cotidiano? ¿Qué palabras salen de tu boca: palabras que te engrandecen o que te empequeñecen?

La limitación no es tu hogar. Sea cual sea tu situación actual, fuiste creado para la grandeza, para lograr sueños grandes en el campo donde te muevas. Tu destino, aunque hoy te cueste creerlo, es ser como un árbol plantado a orillas de un río que, cuando llega el tiempo oportuno, da fruto y sus hojas nunca se marchitan. El primer paso es comenzar a creerlo en tu interior y, cuando menos lo pienses, se convertirá en realidad.

Por consultas, podés escribir a [email protected].

Te puede interesar
Ultimas noticias