Leo Gauna dejó su arte en el ventanal del SCUM

Se trató de una de las primeras actividades que tuvo esta nueva edición de este evento cultural de la ciudad, que continúa hasta este domingo 29 de octubre. El día miércoles (25/10), Gauna, acompañado por Santiago Cereceda de Tribu de Trueno, se acercaron para regalar su arte a la ciudad.

Mientras realizaba los primeros trazos, el artista contó cómo llegó a esta forma de expresión, efímera en su esencia, pero además con planos invadidos por el contexto.

“Soy ilustrador y hago trabajos para medios gráficos, pero hace 7 años dibujo sobre vidrio con fibrones de esmalte sintético, la idea de esto es intervenir el espacio urbano, la circulación de lo cotidiano, en ese contexto he dibujado ventanas en muchas ciudades de Argentina”, manifestó.

Las intervenciones comienzan con un pequeño boceto pero se da un proceso de improvisación influido por lo que “pasa atrás de la ventana, en la vereda”, aclaró.

“El que juega es el espectador que puede mirar la misma obra en verano o invierno, con los cambios de un árbol que esté detrás, o distintas luces como sería el amanecer, dependiendo el efecto climático del día. El dibujo tiene otra impronta en quien lo mira. Eso me parece muy interesante a difencia de una obra bidimensional que uno ve en una hoja o en un óleo”, determinó Gauna.

Este proyecto nació por sus ganas de salir de su casa, ya que por su profesión son muchas horas de de computadora y tablero, y encontró en esta nueva forma de crear el poder viajar y relacionarse con otros, “como fue conocer Bariloche que no lo conocía”.

Al consultarle sobre sí influye en el como autor el que se trate de un arte efímero, el ilustrador dijo saberlo desde un principio, pero que eso “no le quita el disfrute de hacerlo, lo vivo con el cariño de la espontaneidad con la que se hace, cuenta también el que alguien pasa, se acerca y se interesa por la disciplina, siempre lo viví sabiendo que esto se va a borrar”.

Y contó uno de los casos que tuvo cuando debió pintar ventanas en la Bolsa de Comercio en Buenos Aires, “dibujé por dos horas, se inauguró una muestra y después teníamos media hora para borrarla”, recordó.

Por último, se reconoció fan de la línea, “mi trabajo de ilustrador tiene que ver con eso. Mi interés de llegar a la ventana fue, porque yo no hago murales o graffitis porque no sé manejar el aerosol o no tengo tanta relación con los planos y los colores, entonces me vino bien para acercarme con la línea que es parte fundamental de mi trabajo”, y eso fue lo que reflejó en el ventanal frontal y que se podrá ver hasta el domingo 29 de octubre, cuando las ventanas del SCUM sean renovadas por una nueva propuesta, y se despida hasta el año que viene la Fiesta de la Palabra. (Fuente: Prensa Municipalidad de Bariloche)