Su coordinador zonal, Carlos Casalla, envió una breve pero enérgica misiva a El Cordillerano, en la que cuestiona la interrupción del Programa.

El Taller de Bandas atraviesa la misma situación que las orquestas y los coros cuyos funcionamientos dependen del Ministerio de Educación de Río Negro. Como coordinador zonal del Programa, Carlos Casalla compartió con El Cordillerano una breve nota que elevó “a quien corresponda”, en la que pone en común su “preocupación e indignación” ante el desfinanciamiento que impidió el recomienzo de las actividades en febrero último.

El reconocido músico se pronunció “como coordinador zonal del programa Taller de Bandas dependiente del Ministerio de Educación de Río Negro, al cual pertenezco desde sus inicios en el año 2011”, introduce el sintético pero vehemente texto. El percusionista compartió “la preocupación e indignación de mis compañeros y compañeras músicos talleristas y la mía también, obviamente”.

El estado de ánimo es compartido por “padres, alumnos y directivos de las más de 100 escuelas de toda la provincia en las que funcionaba el programa”, resaltó. “El Taller de Bandas, en su trayectoria, ha demostrado con creces ser no solo una herramienta más en la educación musical sino también un ámbito de contención e inclusión de niños y jóvenes de nuestra provincia”, enmarcó Casalla.

El músico destacó que “muchos de ellos continuaron sus estudios musicales en el IUPA (Instituto Universitario Patagónico de las Artes) y otras instituciones luego de egresar de los colegios secundarios. Por todo esto consideramos de suma importancia la continuidad del programa y exigimos una pronta respuesta a esta situación”. Asimismo, “nos solidarizamos con los colegas del programa Coros y Orquesta del Bicentenario”.

Como ya anticipó El Cordillerano en ediciones anteriores, el miércoles (24 de abril) desde las 12, habrá actividades en la sede de UnTER (Elflein 735) para dar visibilidad a la situación. Además de una conferencia de prensa, se desarrollará una presentación musical de la Orquesta del Bicentenario y de la Orquesta de la Escuela de Villa Los Coihues, entre otras participaciones.

Como entre otras consecuencias, las y los jóvenes músicos no tienen chances de acceder a los instrumentos que tocaron hasta diciembre último, sólo podrán interpretar las piezas sus profesores. También se invita a que se hagan presentes exalumnos y otros que cuenten con instrumentos propios para poder dar vida al pequeño concierto. No hay nada más ensordecedor que el silencio.