Además, el dúo que integran Marisa Di Giambatista y Cristina Villafañe reversionó “Florcita de amancay” y dio a conocer “Estrellita del campo”. En 2024 habrá nuevo álbum.

“Florcita de amancay”; “Malambo del Tronador” y “Estrellita del campo” son los tres nuevos temas con que La Maroma arrancó 2024. La dupla que conforman Marisa Di Giambatista y Cristina Villafañe lleva 14 años de creaciones que se inspiran en la flora y la fauna patagónicas, con el ánimo de llegar con la música a la niñez “de todo el mundo”. Las flamantes incorporaciones al repertorio ya están disponibles en plataformas digitales.

En realidad, la primera obra del terceto es una reversión. “Tenemos la alegría de presentar esta zamba con el regalo especial de tener como músico invitado a Mario Coto en canto y armónica”, dice el texto que Marisa arrimó a El Cordillerano. Hay que recordar que el músico formó parte de La Maroma desde sus inicios hasta 2014, “por eso es mucho más especial su presencia en esta obra”, afirma el dúo.

Precisamente, a “esta versión la hemos grabado en el ritmo original de zamba, ya que en nuestro segundo disco fue grabada por Majo Lanzón en estilo de vals venezolano”, recordó La Maroma. En este caso, grabó y mezcló Juan Sisterna. Junto con Mario, Marisa se ocupó del piano y los coros, mientras que su compañera registró “percusión, coros y clima sonoro”, completa la información.

En cambio, “Malambo del Tronador” sí es una absoluta novedad. “Dedicamos esta canción a este gran cerro, glaciar de nieves eternas que se erige majestuoso en el límite de nuestra frontera con Chile”, enmarca La Maroma. “La canción es ideal para jugar con el texto de la letra, ya que sus palabras reúnen grupos de consonantes de sonidos fuertes y repetitivos”. En forma simultánea, “permite trabajar el ritmo del malambo con los pies y el bombo”. El malambo se grabó en el estudio DICAB y para su interpretación, Marisa sumó guitarra.

A “Estrellita del campo” la describieron las músicas como “delicada flor blanca y pequeña con seis pétalos que aparece por la estepa y las montañas hacia el comienzo del verano. Esta canción, con melodía pentatónica, regala un clima suave y delicado, especialmente creado con el sonido del drum”. Se grabó tanto en DICAB con en el estudio del guitarrista. Cristina interpretó el drum, aportó clima y Marisa, piano y canto.

Los dos últimos temas “son partes del nuevo disco. No habrá formato físico, pero sí cancionero, como en los otros tres: libritos con partituras, fotos y explicaciones sobre la flora nativa”, amplió Di Giambatista en diálogo con El Cordillerano. “El álbum se va a llamar Patagonia inmensidad, lo vamos a ir subiendo de a grupos a medida que vayamos terminando temas”, anticipó.

Como es su sello distintivo, “el concepto sigue basado en la flora y fauna, pero también habrá un tema dedicado a la Madre Tierra o Ñuke Mapu; otro a la Patagonia en sí misma como ser inmenso y después sí, canciones para especies de animales o plantas”, resaltó la compositora. “La versión de Florcita de Amancay es como la original, porque yo la compuse como zamba junto a Mario Coto, nuestro primer maromero”.

Para el año que ya atraviesa su cuarto mes, “el objetivo es terminar de grabar más o menos unas 10 canciones que nos faltan para subirlas todas a Spotify y cuando sea posible, hacer el cancionero físico o si no, virtual”, señaló. Mientras, La Maroma “sigue convocando a escuelas y lugares privados para actuar. En la pandemia la teníamos preparada, pero quedó todo parado, así que esperamos ahora poder ir a Córdoba. Estamos organizando eso para la primavera y abiertas a todas las invitaciones que nos puedan hacer”, convocó el dúo, inmensamente patagónico.