ESTE SÁBADO EN ONELLI Y SOBRAL

| 16/08/2018

Madre Depresiva presenta producción

Madre Depresiva presenta producción

La banda que lidera Hernán Pianzola retornará a los estudios en 2019 pero su primer disco todavía tiene pista por delante. Promesa de “rock escénico” de estética “indie”. Desde las 21.30 en Onelli y Sobral.

En la noche de mañana sábado, Madre Depresiva llevará su “rock escénico” a La Llave. La banda que lidera Hernán Pianzola y se identifica con el “indie rock” dará a conocer su disco más reciente, aunque en los planes prevé volver a grabar en el transcurso de 2019. “Letras oscuras, profundas y existenciales”, según promete la información que circula. La cita se pactó para las 21.30 en la institución de Onelli y Sobral.

En diálogo con El Cordillerano, el músico brindó más pistas. “Madre Depresiva tiene una formación de cuarteto clásico: piano - voz, guitarra, bajo y batería. Yo me vine hace cinco años de Castelar, oeste de Buenos Aires, y la banda tiene cuatro. Si uno escucha, las influencias de rock nacional son bastante claras: Charly García… Después, yo me siento un chico Floyd, empecé en la música por Pink Floyd pero las influencias son (David) Bowie, Beatles, Radiohead y obviamente Floyd. Es una banda de canciones”, subrayó.

Sin que hiciera falta preguntar demasiado, el compositor, pianista y cantante agregó: “la idea de la banda es seguir con una carrera artística, es todo netamente artístico… Hacer música y discos, con centro de operaciones acá en Bariloche, pero para movernos en el mundo entero como cancha a jugar. Hicimos un disco producido por Palo Pandolfo, lo grabamos acá en Bariloche, lo mezcló y lo produjo Palo en Buenos Aires y la tapa la hizo Nora Lezano, que es la fotógrafa número uno del rock”, resaltó.

El hombre se codea con grandes. “A nivel nacional, están de invitados Palo y Claudia Puyó, más Pablo Fortuna (Memphis, El Bordo) como saxofonista. A nivel local están Hernán Lugano y Carlos Casalla, entre otros. El sábado tocamos en La Llave y tenemos una larga lista de fechas, como Araucanía, Neuquén, El Bolsón y enero hacemos una gira por Chile”, avisó Pianzola, pura efervescencia. Su obra más reciente ya está disponible en Spotify y otras plataformas.

“El disco es netamente de Madre Depresiva, se empezó a gestar en 2016, cuando empezamos a ‘demear’ los temas. Hicimos un manojo de canciones entre todos y de hecho, las eligieron los chicos, los integrantes de la banda…

Yo los había compuesto, pero quise que decidieran ellos qué temas querían para que se pusieran la camiseta de la banda. Grabamos las bases en lo de Gabriel Pirato Mazza y la verdad, estuvo muy bueno. Fue con la banda en vivo durante toda una jornada”, completó el músico.

Superación

La cosa siguió a 1.700 kilómetros. “Nos tomamos nuestro tiempo para ir mezclando, tirando las premezclas y después mandamos todo a Buenos Aires para que terminara Palo con Matías Parisi, un ingeniero de la puta madre. Él terminó de darle el color a la mezcla”, resaltó Pianzola. “Con respecto a nuestro momento musical, cuando me vine de Buenos Aires creía que mi mejor disco era Resurgimiento, uno que hice análogo por 2000 y algo, creía que no iba a poder hacer algo superior, pero sin embargo, con esta banda, para mi corazón lo superé, más allá de la balanza del bien y del mal”, dijo enigmático.

De todas formas, “creo nuestro mejor disco todavía no llegó, de hecho, ahora estamos presentando muchos temas nuevos que son mucho más Madre Depresiva con esta formación en gestación”. En esa línea, “para 2019 nos estamos preparando para entrar a estudios. En este caso, Palo quiere hacer la producción desde cero: elección de temas y nada, meterse en la cocina de los arreglos principales y la composición. Ese sería su deseo”, puntualizó el músico.

Para el que se está presentando, “Palo se metió a lo último, en la mezcla y en algunas cositas que pudo poner. A él le interesa laburar con nosotros desde la hora cero y eso nos parece maravilloso porque al laburar con Palo, él se convierte en nosotros, superándolo. No hace lo que él quiere, se convierte en un Madre Depresiva”, dijo Pianzola, en relación al fundador de Don Cornelio y la Zona, entre otras páginas gloriosas.

En el rubro estético, “en mis discos anteriores, como tecladista y pianista, estaba rodeado de máquinas: un Marshall prendido, un sampler, una guitarrita ahí parada… Acá tiré todo eso a la mierda y me propuse simplificar todo: yo, piano y voz… Nada de poner nada de más: una guitarra, un bajo y una batería... Esa fue la propuesta, simplificar todo y lograr desde la sencillez, que llegue el mensaje. Me da la sensación que hemos logrado esta etapa”. Las pruebas, el sábado en La Llave.

Cerca de las grandes ligas

Como puede advertirse en su relato, Hernán Pianzola tiene una trayectoria importante: “tuve la suerte de andar por caminos en donde laburé con muchos grandes y grossos, como Charly García, Claudia Puyó… Estuve en contacto con Viejas Locas y con Palo Pandolfo fue con el que más me relacioné artísticamente”, indicó. “A los grossos, te das cuenta cuando los tenés al lado y los ves laburar, ahí te das cuenta de la grandeza. En la tele idealizás, pero cuando ves cómo crean sus cabezas, ahí te das cuenta de lo que son”.

Es con el ex Visitantes que Pianzola más vínculo tiene. “Con Palo hicimos una onda, el tipo es muy generoso y es un gran artista. Siempre va en su camino, nunca retrocede y no le importa nada más que el arte. Para mí tiene la altura de los grandes: Fito, Charly, Spinetta, Calamaro, Ceratti… Está en esa liga. Lo invité a grabar en un disco mío, compartimos escenario en Buenos Aires un par de veces, hicimos una amistad y ahí quedó la relación”.

A partir de esa experiencia, “siempre quedamos en que íbamos a trabajar juntos de nuevo y cada vez que viene a Bariloche, me pasa la lista de temas y toco con él. Hace poco en Villa La Angostura compartimos un show, solos… Solo los grandes hacen eso, no compite con nadie. Bueno, escuchó el material nuestro y me dijo: dame que lo produzco… Le pasé un tema y me dijo: no, pasame todo… Se fue copando y copando y me hizo todo el laburo. Para el año que viene, le voy a mandar 30 canciones ‘demeadas’ y él va a ser mi gran productor. La verdad, con tipos así, entrego el material ciegamente”, admitió Pianzola. Se sabe en buenas manos.

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