Este fin de semana malvivientes ingresaron al SUM de la ESRN 36 y robaron inodoros, mochilas y elementos de luminarias. Esto generó la inmediata reacción de la comunidad educativa y el Centro de Estudiantes emitió un comunicado no solo por lo sucedido, sino por reclamos de larga data que no se han tenido en cuenta.

La misiva está dirigida al Consejo de Educación de nuestra ciudad, y también solicita la presencia de referentes del gobierno provincial en la escuela mientras transcurren las medidas de fuerza.

Realizaron una sentada a las 11 de la mañana y harán otra por la tarde.  “Luego del reciente robo en los baños de inodoros y grifería, las/os estudiantes hemos sufrido las consecuencias”.

Pero ese no es el único motivo. “La escuela tiene muchísimos equipos importantes y esenciales sin funcionar, como calefactores, enchufes, puertas de los salones y los baños, mochilas de los baños, techos y pizarrones viejos y rotos junto con pintura que debería ser renovada por el Consejo”.

Es por lo expuesto que exigen “la reparación inmediata de lo antes mencionado para que nuestra escuela funcione mejor y las/os estudiantes no nos encontremos expuestos al peligro generado por un enchufe que no anda, ni sufran frío en el invierno, por la caldera que lleva un año pidiéndose que se arregle y un calefactor roto en las aulas, techos rotos con goteras y puertas sin manijas que se abren solas”.

Describen que la escuela también tiene otras necesidades importantes que el Consejo debe atender y resolver.

“Se hizo el pedido para que el Consejo limpie el patio exterior (donde se esconden personas y causan inseguridad en las/os estudiantes) en el cual solo han intervenido docentes y personal de apoyo externo sin intervención alguna del Consejo”.

Piden además que se haga inversión en su educación, “empezando por recursos básicos que se requieren para las actividades escolares como cinta en Secretaría, resma de hojas y tinta para impresiones institucionales, afiches”.

Otro problema al que se enfrentan a diario es la faltante de materiales para desarrollar los diferentes talleres. “Faltante de pelotas en el taller de deporte, falta de pintura y pinceles para pintar el mural de la entrada y muchísimo más”.

Ante estas carencias, el Centro de Estudiantes ha intentado ayudar pintado pizarrones, reponiendo botiquines y escuchando las inquietudes de sus compañeros y compañeras. Obviamente, están limitados en su accionar, por eso piden que sea el Consejo quien aporte todo lo que aún les falta.

 Para finalizar dicen: “Queremos una escuela más segura para las/os estudiantes y docentes con un Consejo más atento y activo en la intervención ante estos problemas que no han sido resueltos ni atendidos por las peticiones”.

Advierten “no podemos asistir a clases con normalidad y regularidad en condiciones como estas, por eso ejecutamos las medidas de fuerza y visibilización”.