Antes de emprender otra gira por Europa, el guitarrista tocará en el Camping Musical Bariloche, en compañía de Valeria Giraudo (voz) y Liova León (guitarra).

Como el fútbol, el tango siempre da revancha. Después de una lesión que motivó seis meses de inactividad, Juan Fulgueiras vuelve a la cancha con Seis Cuerdas al Sur, el proyecto solista con el que procura entramar la más porteña de las músicas con horizontes patagónicos. La primera fase del retorno se concretará el sábado (1ro de abril) desde las 21 en el Camping Musical Bariloche y no estará solo.

“Seis Cuerdas al Sur es un proyecto que nació en 2019, desde inquietudes que tienen que ver con lo netamente instrumental y la manera solista de abordar el tango”, recordó el guitarrista, en intercambio con El Cordillerano. “Es una búsqueda de identidad bastante personal y particular que, a la vez, es muy común, porque hacer música no es otra cosa que buscar identidad”, proclamó.

Con esa seguridad, “en esa búsqueda estuve algunos años y después pude lograr el apoyo del Instituto Nacional de la Música (INAMU) para producir algunos audiovisuales. Lo que se terminó de consolidar como idea identitaria es hacer música que no es originaria o característica de estas zonas, con identidades de acá a partir de las imágenes”, definió. “Así nació la idea de hacer audiovisuales para identificar esta zona que habitamos con esta música, que nos habita”.

Pero el proceso supo de un tropezón. “Postpandemia tuve una lesión en un tendón, pero por suerte, me recuperé 100 por ciento y entonces, eso pone de nuevo en valor la posibilidad de hacer música y compartirla. Esta es una fecha muy importante para mí porque tengo gran felicidad de reencontrarme con la gente y compartir música desde la salud, así que estoy muy agradecido”, resaltó Fulguerias.

En términos audiovisuales entonces, “Seis Cuerdas al Sur tiene tres producciones nuevas, dos ya se pueden ver en YouTube. Son piezas que grabamos con audio en vivo, porque la idea es que el audio sea en vivo en el lugar de la toma”, resaltó. “Grabamos tres tangos en la Estación Perito Moreno, allá en la estepa, en una producción que me pareció muy sentida y muy linda. Eso me dejó muy feliz y lo que se va escuchar el sábado es parte de esta búsqueda artística y estética”, anticipó.

En la noche del Camping “va a estar muy presente el encuentro con otras músicas y músicos. En el caso de la voz, estará a cargo de Valeria Giraudo, con quien venimos hace bastante encontrándonos y compartiendo una manera muy personal del ver el tango y de transitarlo. Para mí es una muy linda experiencia porque Valeria tiene gran solvencia técnica y mucha formación vocal, entonces, es un placer trabajar con ella”, resaltó.

Por otro lado, “voy a tener la suerte de contar con la presencia de Liova León, un gran guitarrista que vino hace poco de Buenos Aires y se está estableciendo en Bariloche”, informó Fulgueiras. “Conoce muy bien el género, tenemos amigos en común y estudiamos en la misma escuela, entonces es una alegría encontrarme con él en la música y el tango”, celebró el anfitrión.

El guitarrista comenzó a despedirse con una suerte de exhortación. “La invitación de este proyecto siempre es conectar con la afectividad latente dentro de la música y con la vivencia de asistir adonde haya música en vivo”, señaló el músico. “Por ahí, esta idea que otrora era tan natural y normal, hoy en día y postpandemia no está siendo tan como pensábamos. Entonces, también es militar el encuentro musical como algo único e irrepetible y que vale la pena vivir. De eso se trata esta convocatoria”, remarcó.

Después del concierto en el Camping, habrá que despedirse de Fulgueiras por un tiempo. “Tuve la alegría de que Cancillería de la Nación (el Ministerio de Relaciones Exteriores) declarara el proyecto de interés, entonces por ahí eso habilita una mirada un poco más federal del tango para que no se monopolice en Buenos Aires. Eso es algo bastante injusto y sesgado”, consideró. Como consecuencia de ese y otros factores, “en mayo tengo confirmada una gira por Europa y eso también es un desafío grande, un aliciente para el trabajo y la búsqueda. Así que son tiempo para estar agradecido”, insistió Fulgueiras. Las suyas son seis cuerdas, pero bien al sur.