Animador de la escena rock-pop de Bariloche, quizá llame la atención que el músico grabara un álbum de piano instrumental, inspirado en un período clave para la historia de la música académica. Pero eso hizo.

Hombre inquieto, Marcos Cohen integró varias bandas de rock en Bariloche y, además, incursiona en la poesía. Al ser un animador de la escena rock-pop de la ciudad, quizá llame la atención que su creación más reciente se titule “Romanticismo” y se componga de ocho piezas de piano instrumental, de carácter académico. Su obra se puede obtener en disco compacto previo encargue y también, hay un primer videoclip disponible en YouTube.

El cronista quiso saber por qué la referencia a etapa tan trascendente de la música llamada culta. “Está buena la pregunta porque a veces, aunque sea en pocos casos, puede que se entienda (a su música) como algo romántico, pero en realidad tienen que ver con el período histórico”, corroboró Cohen. “Este es el segundo álbum que hago solamente de piano, con composiciones mías. Siempre noté la impronta de ese estilo en lo que hago instrumentalmente, entonces quise darle esa identidad. El anterior se llama Nopia, todavía tengo ejemplares (sonrisas)”.

El antecesor es de 2016 y “esa vez, la preocupación con respecto a las composiciones fue más un armado que algo que viniera de la nada, como pasó en este caso”, diferenció. “En menos de un mes tenía las composiciones”, mencionó. “Arranqué con una instrumental que tenía del año pasado, que salió entre 27 canciones que había hecho. Quedó ahí, más el fragmento de otra, así que tenía una y media. Después, este año, completé la que estaba por la mitad, hice una, otra y cuando tenía tres, pensé que, con cuatro ya podía pensar en un álbum, pero no creía que se diera”, admitió el músico.

Sin embargo, “de repente salieron otras cuatro o cinco. Creí que ocho era un buen número para encararlo (al álbum) y entonces, sucedió. Fue de lo más espontáneo en cuanto a composición, fue impresionante porque tiene más complejidad para la mano izquierda y en cuanto a las melodías”, en relación al trabajo anterior. “Las armonías siguen siendo bastante particulares, porque quizá no son tan habituales: 9° bemol, 5° aumentada o bastantes cosas que realmente, no sé bien cómo se fueron dando”, se extrañó Cohen.

Es que “la composición iba pasando, era una cuestión muy natural, tenía que ser eso y ninguna otra cosa”, declaró. “Seguí ese instinto, esa intuición y fue lo que me fue llevando. Ya te digo, en menos de un mes tenía las composiciones hechas. Entonces, dije: voy a grabarlo. La idea era hacer una tirada muy modesta, pero de repente surgió la idea de masterizarlo, que siempre es bueno”, señaló.

Con ese propósito, “recurrí a Matías Campos Bianchi para darle una sonoridad bien estándar en todas las maneras de reproducir. Primero, no iba a hacer ninguna sesión de fotos ni nada, iba a utilizar unas que ya tenía, pero después pensé en ambientarla y darle un sentido en relación al nombre: Romanticismo, porque es el período donde está toda esta música que me gusta mucho”, recordó Cohen.

En efecto, “en esa época arrancó Beethoven y después en su apogeo, estuvo Chopin, que son dos de los que más me gustan, junto con Bach y Mozart, que son anteriores”, diferenció. El Romanticismo “era lo que yo quería representar, entonces, desde ese lugar hice esta puesta, de complementarlo con lo visual”. Detrás de esa búsqueda “me puse en contacto con Roll Producciones y encaramos todo el arte de tapa, las fotos y demás, ambientados en esa época, a la par de video, que ya está en YouTube, con el nombre ‘26 días (Rotación solar)’. También se puede buscar con mi nombre”.

Con la urgencia de los tiempos que corren, “todo se dio en tres meses y me encantó, porque a mí me gusta lo espontáneo. Le di ese lugar, sin pensar en mucho más. Era todo sí”, graficó el artista. “El piano estuvo siempre en mi vida. Cuando era chico, me gustaba mucho cantar y por ese mismo sentimiento o pasión, primero probé con la guitarra, pero no me cerró. Después me volqué de lleno al piano, fue un amor a primera vista”.

Gracias a esa certeza, “en el piano puse todo lo que soy y mis ganas, es mi instrumento predilecto, aunque también compongo y toco la guitarra para acompañarme”, aclaró Cohen. “Siempre hubo cositas que salieron que no era canciones, pero tenían algo especial, entonces por eso el piano”, justificó. Para obtener “Romanticismo”, hay que escribirle a Cohen a [email protected]. Y para seguirle la huella, prestar atención a los sucesos musicales de las noches barilochenses.