“La justicia, esta vez, respondió como queríamos”, dijo Luis Caro, papá de Lucas -el joven de diecisiete años que falleció durante los primeros minutos del 28 de febrero al ser atropellado en la avenida Bustillo–, en relación a la audiencia de control de acusación, donde la fiscal Betiana Cendón solicitó la apertura del juicio oral y adelantó que pedirá seis años de prisión (lo máximo posible de acuerdo a la calificación legal del hecho: homicidio culposo agravado) para Matías Vázquez, quien conducía -con alcohol en sangre- el vehículo que terminó con la vida del adolescente.

Lo que dejó mayormente tranquilo a Luis fue la decisión de que el acusado continúe en prisión domiciliaria hasta la realización del juicio.

Si bien en un momento los familiares de Lucas habían mostrado su descontento por la decisión de que Vázquez permaneciera recluido en la casa, en vez de en una cárcel común, estaban prevenidos acerca de que en la audiencia existía la posibilidad de que ni siquiera eso continuara en pie. “Se corría el riesgo de que quedara en libertad”, señaló el padre del muchacho fallecido.

“Teníamos ese miedo”, confirmó.

Foto Matías Garay

Igualmente, aclaró que, para él y su esposa, el hecho de que el acusado esté en su casa no resulta agradable. “Pero que no ande por la calle nos da cierta calma”, detalló, y remitió su sentir a lo expresado por la fiscalía, acerca de un riesgo de entorpecimiento del proceso en caso de que quedara libre.

Hace unos días, Luis había expresado su descontento ante los tiempos que suele tomarse la justicia. “Uno a veces habla en contra, pero hoy me dio algo de esperanza. La jueza (Romina Martini) actuó como pretendíamos”, indicó.

El papá de Lucas, por otra parte, volvió a cargar contra el letrado de Vázquez, Juan Pablo Álvarez Guerrero. “Habla paparruchadas, y nos ha denigrado como familia. Sentimos que no se porta como un abogado”, sentenció.

Asimismo, explicó que en ocasiones se siente molesto por la actitud que algunos muestran hacia quien conducía el auto que atropelló a Lucas. “Sabemos que el asesino es él, pero a veces lo ponen como víctima”, apuntó.

La audiencia se llevó a cabo bajo la modalidad Zoom, y en las imágenes que registraron el encuentro virtual, se pudo ver a Verónica Salinas, esposa de Luis, pero no a él.

“Estaba al lado de mi mujer, pero preferí no aparecer, por una cuestión de nerviosismo, debido al temor de que Vázquez quedara libre… Además, era repetir todo una vez más”, manifestó, ante la situación de tener que volver a recordar detalles de la madrugada fatídica en la que su hijo murió.

De ahí que, tras la audiencia, le haya quedado una mezcla de “alegría y amargura”.

“Uno no sabe a veces si lo que pasa es bueno o no, pero, en esta ocasión, estar seguro de que Vázquez no esperará el juicio en libertad, que aunque sea tenga que permanecer en su casa, da un poco de alivio al alma”, concluyó.