Viene del hardcore de los 90 pero ahora se inclina por la fusión de estilos, con influencia confesa de Manu Chao. Boleros en diálogo con el hip hop y el dub.

Diego Numa da a conocer su más reciente single y videoclip: “Te lo juro yo”. Las y los memoriosos recordarán que se trata de una canción del célebre ítalo-belga Salvatore Adamo, de gran éxito en la década de 1960. El intérprete se encuentra abocado al lanzamiento de su próximo álbum junto con Los Últimos Románticos, nombre que dice todo. El registro se llamará “1977”.

Numa no solo se propuso rendir tributo a la figura de la canción romántica, además, el videoclip es un remake de la escena que protagonizara Rocío Jurado en el film “Las cosas del querer”, según informó la producción del músico. El trabajo argentino fue filmado por Ángel Bernuy, quien también se ocupó de la dirección. En tanto, los temas de “1977” contaron con la producción, grabación y mezcla de Pablo “Bocha” Otero y el propio Numa. Otero es tecladista en Andando Descalzo.

Los orígenes musicales de Numa pueden desconcertar. Arrancó en la niñez y en los 90 formó parte de la banda hardcore Fuerza Interna, en la que se desempeñó como cantante. El grupo alcanzó popularidad dentro de la enérgica movida hardcore - punk de esa década y legó un álbum, que contó con la grabación de Gabriel Ruiz Díaz (Catupecu Machu). Luego, entre 2000 y 2005, formó parte de los grupos Banban Clan y Los Fuegos.

Más cerca en el tiempo, Numa avanzó hacia una forma de componer y fusionar ritmos, influenciado por la estética de Manu Chao. Con ese bagaje a cuestas, tomó la decisión de grabar su primer disco solista. El álbum reversiona canciones que escuchó durante toda su vida en clave de boleros: “Mi gran amor te di”, “El día que me quieras”, “Bonita”, “La nave del olvido” y “Hay amores”, son los cinco clásicos que eligió incorporar.

“Durante más de 10 años no estuve en ningún proyecto solista. Estaba solo con mi compu y mis instrumentos. Hice muchas maquetas fusionando muchos géneros”, dice el músico en su página web. “Me gustaba mucho la manera que tenía Manu Chao en sus composiciones, sus maneras de fusionar sonidos de los 70 con samplers de hip hop, en un ritmo de bolero, cumbia o reggae, con la psicodelia del dub y el sentimiento que necesita la canción”, añade. Romántico incurable.