Vuelve Minifest – Festival de Danza Contemporánea

La idea que a título de delirio pusieron en marcha Valentina Gallo y Brisa Krienke en 2018, ya es cosa seria. Se extenderá durante siete jornadas con laboratorios, talleres, funciones, una charla y fiesta de cierre.

Con La Llave como epicentro pero con actividades en la vía pública y en la Biblioteca Carilafquen (Villa Los Coihues), entre el 16 y el 22 de enero se llevará a cabo el Minifest – Festival de Danza Contemporánea Tercera Edición. El título del acontecimiento encierra alguna solemnidad, pero nada más alejado del espíritu que anima a Valentina Gallo, Brisa Krienke y Laura Oberlin, tres de las organizadoras de tan novedoso como persistente cónclave artístico.

En 2018, “para nada estaba en los planes” arribar al inminente tercer capítulo, según admitió la primera de las bailarinas. “Por ahí sí en un deseo que era grande pero me parece que nos sorprende una vez más que se arme, porque si bien hay un trabajo de gestión grande pasa algo que también sucede: las ganas que tiene la gente de venir, de ayudar y de aportar. Eso hace que sea, que se arme y se haga”, explicó.

El Minifest 2020 “siento que viene cada vez más completo”, opinó Krienke. “Este año va a haber talleres y tenemos uno al aire libre en la vía pública, además hay una charla increíble sobre danza, jam y una fiesta de cierre, que el año pasado tampoco teníamos. Es como que se va cerrando en algo muy completo, inclusive dentro de los festivales que conozco”, apuntó. El cronograma final resultó tanto de las previsiones del grupo organizador como de las ansias por participar de otros bailarines y docentes. “Lo que nos va pasando es que año a año, llegan cada vez más propuestas de gente que quiere venir a hacer cosas, entonces hay que armarlo y organizarlo”, sintetizó la organizadora.

En cuanto a Oberlin, “me sumé este año a la organización, me convocaron las chicas a partir del deseo de bailar en Bariloche. Eso es lo que nos convoca, al menos a mí, para poner toda la fuerza y que esto salga. Mucha energía para que este Minifest sea más completo, que más gente nos apoye y pueda vivir la danza en Bariloche” subrayó. Durante siete jornadas, se vivirán entre uno y tres acontecimientos por día.

“Tenemos el privilegio de traer a una compañía que viene de Barcelona, así que este año el festival se puso internacional”, resaltó Gallo. “Traen una propuesta de ‘flyng low’ (sábado 18 a las 14 horas) y es muy interesante, porque la persona estudió directamente con su creador. Entonces, que venga a Bariloche esta técnica y en su esencia tan pura, me parece que es un gran aporte porque a veces, la información nos llega algo entrecruzada”. Se trata de Edward Tamayo, que “es colombiano pero actualmente vive en Barcelona”.

Filosofar
sobre danza

Otra de las novedades: “vamos a tener una charla re interesante porque este año, nos ayuda a que la edición sea posible la Biblioteca Popular Carilafquen y nos parecía sumar una actividad ahí (domingo 19 a las 20.30). Siendo una biblioteca, vamos a llevar una charla para filosofar, pensar un poco en torno a la danza y al cuerpo, con la docente Roxana Galand.

Además de dar un taller (Biología, clásico y misterio – lunes 20 a las 11) va presentar esta charla, que se llama ‘La voluntad de ser lo inédito que brota’”.

Desde ya, habrá continuidades: “vamos a tener la Jam (miércoles 22 a las 19), que venimos sosteniendo todos los años y algunos docentes que se van a repetir porque es la tercera vez que vienen. Eso también queremos remarcarlo, porque hay gente que hace tres años que viene apoyando el festival. Además, estará la función histórica que es el ‘Montonazo’, en la fecha de cierre (martes 21 a las 21.30), con improvisación de música y danza, donde nos mezclamos todos. Ya se está volviendo como ‘la’ función de cierre”, completó Gallo.

Será el único momento en que las bailarinas barilochenses se subirán al escenario, por así decirlo. “En Montonazo se mezclan la gestión, es decir, la organización, con los docentes. Además, hay música en vivo, con la participación de músicos locales, como Santiago Rapoport, que también año a año está con nosotras. Esa va a ser nuestra participación escénica porque después, vamos a estar detrás de todo”, explicó Krienke.

“Otra de las novedades de este año es que va a haber una clase en la calle”, añadió su compañera. “El año pasado tuvimos una en la naturaleza, la hicimos en el bosque pero este año, una de las docentes trae la propuesta de una clase en el espacio público, en la ciudad (domingo 19 a las 17.30). Está re interesante porque la metimos dentro de las intervenciones, que ya veníamos haciendo. Está bueno este laboratorio que plantea la calle como un espacio de clase”.

Ganar la calle tiene una finalidad. “Siempre remarcamos que las intervenciones, lo que hacen es llegar a un público que no tiene nada que ver con la danza contemporánea o que jamás se acercaría a verla. Al irrumpir en el espacio público nos encontramos con muy buenas devoluciones o con sorpresas, porque la gente se sorprende de ver cosas que por ahí, no vio nunca”, estimó Krienke. A dejarse sorprender, entonces.

El nombre se consolida

Con dos ediciones a cuestas y otra a punto de concretarse, la iniciativa se consolida. “Hace poquito estuve en Buenos Aires y me he cruzado con gente que me dice: ‘¡Ah! Vos sos la que organiza el Minifest’. Al existir pocos festivales de danza (contemporánea) en toda la Argentina, se está viendo. Además, creo que la propuesta es muy tentadora y está siendo una referencia de la danza en Bariloche. Por eso también a veces nos llegan propuestas para organizar otros seminarios en otros momentos del año”, compartió Valentina Gallo.

“El Minifest es una semilla que las chicas sembraron y hoy por hoy, es una planta que tiene presencia y circula”, consideró Laura Oberlin. “Durante el año mandan mails para preguntar cómo participar con seminarios o talleres, (el festival) ya no es algo que no se conoce. Dentro de la danza contemporánea se conoce y en Bariloche también estamos llegando a gente que nos conoce a nosotras personalmente pero por algún lugar llegan. Creció mucho”, insistió.

Aun así, en 2020 “estamos viendo cómo difundirlo para poder llegar a más gente, porque el círculo de la danza contemporánea en Bariloche es muy pequeño. Entonces, estamos viendo cómo abrirlo a otras ciudades cercanas y dentro de Bariloche, le dimos este año un poco más de importancia a las redes sociales porque hay que adaptarse”, compartió Krienke. “Viene gente de Neuquén, de San Juan, de Córdoba y de Buenos Aires al Minifest”, señaló Oberlin.

En los últimos meses se advirtieron además cruces entre la danza contemporánea y otras disciplinas. “Acá en Bariloche tenemos la carrera de Teatro y mucha gente de ese palo, ya se inscribió en los talleres. Nos interesa atraer a la mayor cantidad de gente posible, cualquier persona que tenga un interés puede venir y no importa cuál sea su experiencia, edad o cuerpo”, avisó Gallo.

En cuanto a las funciones, Krienke prefirió ser equitativa a la hora de las recomendaciones. “Es difícil. Es la primera vez que traemos una obra por fuera de los talleres. Siempre las obras las habían hecho los profesores del festival pero este año, tenemos una que está dirigida por una profesora pero que trae a su elenco desde Buenos Aires. Tenemos la función compartida: Cortos de Danza, tres obras en una sola noche (viernes 17 a las 21.30). Esto está bueno por si no te decidiste qué ver, ahí habrá un popurrí de visiones sobre la danza.

Después está I’m not arround, de la compañía que viene de Barcelona (sábado 18 a las 21.30) y La ira de las sirenas (lunes 20 a las 21.30), esta que decía que dirige María Kumichel y que viene con sus dos sirenas (sonrisas) y después, la función de la que ya habló Valentina: el Montonazo. Es imperdible, porque lo que sucede ahí, no vuelve a suceder. Es un momento único”, invitó la bailarina. Imperdible convite.

Adrián Moyano