El ministro de Economía y candidato presidencial, Sergio Massa, presentó los ejes principales del “Plan integral de promoción y desarrollo del turismo internacional”. La iniciativa busca consolidar a la Argentina como el principal destino turístico de la región a través de un fuerte impulso del turismo receptivo.

“Una de las cosas que se define este domingo, es si sigue o no el PreViaje. Creo que el sector turístico, hotelero y gastronómico en una economía global, en una industria del entretenimiento, con gente que tiene más ocio, el tener bien enfocado el crecimiento del sector recibiendo mercado internacional es fundamental”, dijo Massa.

Dentro de los objetivos de la iniciativa, se encuentran alcanzar los 10 millones de turistas internacionales en 2027, generar USD 28.000 millones de ingresos para el país en ese período y contribuir a que el sector represente el 12% del PBI.

El plan de Massa consta de siete puntos: El primer ítem del programa es la ampliación de las escapadas turísticas desde países limítrofes, la fuente más rápida de crecimiento. Con ese objetivo, se buscarán mejorar los pasos fronterizos en infraestructura y tecnología e impulsar recitales masivos en ciudades que queden a entre 200 y 300 kilómetros de los ingresos.

El segundo punto del plan contempla el crecimiento en la conectividad aérea internacional a través de la inversión en Aerolíneas Argentinas. Allí se buscará recuperar rutas de la aerolínea local con París, Londres, Ciudad de México y Los Ángeles, entre otros destinos. Además se trabajará en una baja en las tasas aeroportuarias.

El tercer eje será poner en marcha una estrategia para recibir 175 mil turistas chinos por año, consolidando al país como el principal destino turístico de China en América Latina. Para eso se prescindirá del pedido de visas y se establecerá un vuelo desde el gigante asiático a la Argentina.

El cuarto tiene como premisa impulsar a la Antártida como destino turístico nacional. Es por eso que la intención es desarrollar el puerto de Ushuaia para recibir una mayor cantidad de cruceros internacionales.

El quinto ítem propone potenciar a la gastronomía argentina y al vino como foros de atracción, rubros que están directamente vinculados a la cadena de la industria turística. Uno de los objetivos es que la Guía Michelin desembarque en dos nuevas ciudades y el Gobierno espera lanzar un plan de créditos para el turismo vitivinícola en destinos “emergentes”.

El sexto es que la Argentina se convierta en anfitrión de grandes eventos culturales. Un caso sería traer grandes competencias deportivas, como en el caso del Mundial de fútbol 2030 y captar eventos culturales de relevancia global en destinos federales.

Por último, se trabajará en programas de estímulo al turismo de reuniones y eventos. Se buscará allí canalizar la inversión que se realiza en acciones en países del extranjero para lograr que el país sea sede de eventos, congresos y conferencias con presencia internacional.