Víctima de violación grupal en Palermo: "Nunca di mi consentimiento, esto me arruinó la vida"

La víctima de la violación grupal ocurrida en Palermo en febrero de 2021 declaró durante el juicio que se sigue a los seis acusados. La joven de 22 años aseguró frente a los magistrados: "Nunca di el consentimiento, esto me arruinó la vida". En su testimonio, reveló el impacto que este ataque sexual ha tenido en ella.

La víctima, quien solicitó preservar su identidad, afirmó que nunca habría dado su consentimiento para mantener relaciones sexuales con alguien. Resaltó que no es su inclinación sexual y que el ataque ha dejado secuelas profundas en su vida. Los seis detenidos se encuentran en prisión preventiva por coautoría del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado.

La joven, estudiante de 21 años en el momento de los hechos, continúa recibiendo tratamiento psicológico debido a las consecuencias y traumas que ha enfrentado desde el ataque sexual. La víctima expresó su temor a salir a la calle y ser reconocida, así como las pesadillas y sensación de peligro constante que experimenta. Relató que sueña con ser secuestrada y llevada a lugares oscuros.

En relación a lo ocurrido aquel día, la víctima afirmó no recordar nada. Sin embargo, los estudios toxicológicos revelaron la presencia de alcohol, marihuana y anfetaminas en su organismo. A pesar de la posibilidad de declarar remotamente o en otra fecha, la víctima decidió presentarse de manera presencial ante el tribunal para dar su testimonio.

Se espera también la declaración de la madre de la víctima y el amigo que estuvo con ella aquella madrugada, antes de que el grupo de imputados la abusara dentro del auto. El juicio, que comenzó con momentos de tensión entre los familiares de los imputados y el abogado de la denunciante, continuará en días posteriores con la declaración de más de 30 testigos.

La justicia se encargará de determinar las responsabilidades y las penas correspondientes para los acusados, quienes enfrentan cargos por abuso sexual con acceso carnal agravado por la intervención de dos o más personas, así como por lesiones leves a un testigo agredido durante su detención.