Según Gonzalo Cabrera, víctima de tentativa de homicidio en Cuesta del Ternero, el más alto de los dos sujetos que aquel día llegaron al campamento de la Lof Quemquemtreu le apuntó al pecho y le disparó a una distancia de dos metros.  La defensa explotó contradicciones en el testimonio. 

El relato señala que aquel día vieron llegar a las dos personas y, al interceptarlas y preguntarles qué hacían, respondieron que cazaban liebres. 

Sin más, se produjeron los disparos y cayó al suelo. Cuando intentaba recuperarse vio a Elías Garay, también en el suelo, escupiendo sangre.

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Así abrió la segunda jornada del juicio contra Diego Ravasio y Martín Feilberg, acusados de haber asesinado a Elias Garay y del intento de homicidio de Gonzalo Cabrera.

Tras el primer tramo del testimonio, Cabrera resultó categórico, pero el defensor oficial Nelson Vigueras, explotó contradicciones en la declaración, apelando a una grabación de su relato, a pocas horas del hecho, ante un oficial de policía. 

En este tramo,  surgió de su primer relato que uno de los agresores llevaba un rifle y el otro una pistola,  en tanto que los disparos se produjeron después de varias advertencias que lanzaron los sospechosos.

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Según narró, apenas vieron a estas dos personas se acercaron a preguntar qué hacían ahí. "Me acerqué a uno de ellos e intenté sacarle el arma. Nos decía que no nos acerquemos más, nos íbamos acercando y retrocedian. Yo intenté sacarle el arma", repitio. 
En esa declaración dada a horas del hecho, en el Hospital, dijo recuerdar todo. Ahora tiene lagunas.