Los Espacios de Vida Estudiantil son parte de la Nueva Escuela Rionegrina y los estudiantes son los protagonistas de cada uno de los proyectos que luego se transforman en talleres cuatrimestrales.

Verónica Riquelme, referente del Espacio Vida Estudiantil, y Andrea Duprez, vicedirectora del turno mañana de la ESRN 36 de calle Palacios 2297, brindaron detalles de lo que vienen desarrollando los estudiantes en el EVE.

Se trata de un espacio autogestionado por los estudiantes, presentando proyectos de talleres y llevándolos adelante, contando con el apoyo de la referente, docentes y adultos de la comunidad educativa.

Dos estudiantes de cada agrupamiento ejercen la función de delegados. “Ellos nos comunican qué talleres les gustaría tener y vamos viendo qué necesitan para hacerlos”. A veces no cuentan con las personas que los desarrollen, entonces ven la manera de transformarlo en otro que sí puedan concretar.

“Siempre escuchamos lo que los chicos quieren porque es la única manera de que los talleres funcionen y que todos asistan”.

Esos proyectos son elevados a dirección, donde se ve la viabilidad, luego se convoca a toda la escuela para que se inscriban a los que sean de su interés.

Lo interesante de estos talleres es que se componen con integrantes de todos los cursos, de primero a quinto año. “Son cuatrimestrales por lo que los chicos y las chicas deben proponer dos por año”.

Todos los miércoles de 8 a 10 de la mañana o de 13:30 a 15:30 horas, dependiendo del turno al que asistan, los estudiantes se dirigen directamente al taller que eligieron. “En algunos viene gente externa del colegio para coordinarlos”, remarcaron.

“La meta del equipo directivo era que los chicos y las chicas lograran autonomía en la coordinación y en esta escuela se logró en muy pocos meses”, resaltaron.

El Cordillerano hizo un recorrido por la escuela y en cada uno de los talleres pudo observar una gran cantidad de asistentes, cargados de entusiasmo. “Estamos teniendo una asistencia casi total, saben que este es su espacio y que les dimos el lugar para desarrollar cada uno de sus proyectos”.

Talleres e insumos

Es muy amplio el abanico de propuestas que han planteado los estudiantes por medio de los proyectos presentados en el ESRN 36. En el turno mañana cuentan con el de cocina con y sin cocción, arte grafiti y origami, deporte, cine debate, danza urbana, folklore fusión, juegos de mesa, taller coral y grabado.

Por la tarde, el taller de deporte, ping pong, cine debate, cocina, danza libre, dibujo, juegos de mesa, taller coral y grabado. 

Los materiales que necesitan van viendo de conseguirlos, ya sea de manera personal o grupal, en algunos casos son aportados por Educación. Es por ello que están abiertos a recibir donaciones de pinturas, pinceles o insumos para los cursos de cocina como harina, azúcar, manteca y leche.

Salir a la comunidad

Una de las consignas en la ESRN era que, por medio de los talleres, se hiciera contacto directo con la comunidad, una propuesta sumamente enriquecedora. “Hacer intervenciones comunitarias y abrir la puerta para que la comunidad pueda trabajar en la escuela”. Por eso se abrió una convocatoria a aquellas personas que quisieran acercarse a colaborar en los talleres.

En este momento hay cuatro voluntarias en el turno mañana. “Están dando cocina, una agrupación de folklore y una mamá que pinta y da grafiti y origami”.

Ahora están preparándose para esa salida tan esperada, articulando con instituciones. “Van a renovar todos los murales de las paredes de nuestro edificio y van a pintar una garita de micros”.

Además ya tienen listos unos libros de mandalas para colorear, los que serán entregados al área de oncología infantil del Hospital Zonal Bariloche y juegos de mesa para un jardín de infantes.