"CRÓNICA DE LA AVALANCHA DEL CERRO VENTANA”

| 04/09/2022

Leer “Nadar para arriba” parte el alma

Leer “Nadar para arriba” parte el alma
¿Cómo contener las lágrimas? Foto: Verónica Moyano.
¿Cómo contener las lágrimas? Foto: Verónica Moyano.

El libro se presentó ante una asistencia imponente en la sala de prensa de la Municipalidad. Imposible no recorrer sus páginas con la sensibilidad a flor de piel. Tiene como autora a la escritora Verónica Battaglia.

Es del todo desusado que la presentación de un libro en Bariloche reúna cerca de 150 personas. Quizá fueron más todavía quienes, en la tarde noche del jueves, se dieron cita en la sala de prensa de la Municipalidad para acompañar a Verónica Battaglia, cuando dio a conocer “Nadar para arriba” (Griselda García Editora). Es que también fue inusual el hecho que ventila: “Crónica de la avalancha del cerro Ventana”.

De hecho, así comienza su trabajo: “Era difícil de creer que un alud de nieve había caído en Bariloche, un destino con un paisaje inolvidable y sumiso para las fotos de los egresados y de las vacaciones en familia. Hasta ese momento, se suponía que Bariloche no era una zona de avalanchas”. La autora trae a colación el antecedente de 1994 en el cerro Tronador, cuando un alud se cobró la vida de tres asistentes a “un curso de guía de alta montaña”.

Pero en 2002, “más inverosímil aún era una avalancha al borde de la ciudad, cruzando la ruta 40, a media hora de caminata del barrio El Pilar II”. Sin embargo, ocurrió y terminó por provocar la muerte de nueve estudiantes de la carrera de Educación Física, de la Universidad Nacional del Comahue. No por nada una contribución importante a la asistencia del jueves provino de la casa de altos estudios.

La cita estaba prevista para las 19, pero el comienzo se demoró, a la espera de que, precisamente, arribara un contingente de estudiantes. A pesar del sino trágico de la evocación, el clima era más bien jovial antes de que comenzaran las palabras. Sin embargo, la madre de una de las jóvenes que participó de aquella salida infausta le confió al cronista que se quedaría cerca de la puerta, en caso de no poder afrontar la emoción.

Battaglia compartió la mesa con Violeta Moraga, comunicadora de la cooperativa Al Margen. La presentación propiamente dicha comenzó con la proyección de algunas imágenes de la montaña, mientras se escucharon audios de las entrevistas que la autora mantuvo con varios y varias de los jóvenes, 19 años después de la tragedia. Sus testimonios son centrales para sostener la trama de “Nadar para arriba”, una obra de no ficción.

En sus primeras páginas, el libro revive los sucesos del 1º de septiembre y días siguientes con suspenso y tensión, como si se tratara de una narración ficticia. Pero cuando leemos los nombres de los protagonistas, de los integrantes de la Comisión de Auxilio, de los docentes y las referencias geográficas, sabemos que estamos frente a una historia tan real como desgarradora.

“El médico y el rescatista subieron a la rejilla de adelante del four track y guiaron al chofer hacia donde suponían que estaban los depósitos del alud. Más alto en la pendiente, el cuatriciclo se deslizó sobre un suelo enjabonado hasta que las ruedas se hundieron en un mar blanco. Ramón y su compañero siguieron a pie. Corrieron a contrarreloj enterrándose hasta las rodillas”. Ramón es Chiocconi, actual legislador provincial. Y ese, el tono de la narración.

Perplejidad y emoción. Foto: Verónica Moyano.

Lee también: Cómo continúan con su vida las y los sobrevivientes, 20 años después

Durante la charla en la presentación, Battaglia reiteró conceptos que ya compartió cuando El Cordillerano anticipó la publicación de su libro, tres semanas atrás, entre ellos, que la pulsión por escribir sobre la avalancha surgió durante una caminata por el cerro Carbón, al escuchar a un guía que había participado de aquella salida. También, que la resistencia inicial del ambiente de la montaña fue cediendo paulatinamente y que el episodio marcó un antes y un después en la historia del montañismo, no solo en Bariloche, sino en la Argentina toda.

Será imposible leer el libro sin que se parta el alma, sin que se derrame una lágrima o se atenace la garganta. Es que además de la reconstrucción de los hechos, contiene palabras de las chicas y chicos que murieron, al utilizar como fuente fragmentos de las autobiografías que habían escrito para la materia Historia de los Deportes. Por ejemplo, legó sin saberlo Gimena Padín: “Qué sensación rara dejar a mi familia, mis amigos, mi ciudad. Me subí al colectivo y vi toda esa gente, me dieron ganas de llorar… Pero sentía que debía irme, concretar mi meta. Esa meta que había elegido a los seis años. Así que continué destino a Bariloche. No frené el colectivo, no lo hice. Me sentí segura”.

Consumado el desastre y al no aparecer su cuerpo, su padre, Agustín, subió al Ventana durante dos meses todos los días. “Esperará hasta que cada cristal de nieve se derrita y la primavera le devuelva su hija”, escribió Battaglia. Y hay que agradecerle.

¿Que opinión tenés sobre esta nota?


Me gusta 0%
No me gusta 0%
Me da tristeza 0%
Me da alegría 0%
Me da bronca 0%
Te puede interesar
Ultimas noticias