JUICIO POR MICAELA BRAVO

| 21/06/2022

“Reuníamos a las familias, les pedíamos que si habían visto algo, si sabían algo, que llamen a la Policía"

“Reuníamos a las familias, les pedíamos que si habían visto algo, si sabían algo, que llamen a la Policía"
Foto de archivo. (Matías Garay)
Foto de archivo. (Matías Garay)

La reapertura del juicio contra Angélica Paine se dio con el relato de María Alejandra Britos, quien un tiempo antes de que ocurriera el hecho, ya era directora del jardín Mundo Nuevo, donde vieron por última vez a Micaela Bravo.

Recordó el día de la desaparición porque coincidió con un taller que dictaban para las madres que quisieran quedarse, relacionado al Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia, que se conmemoraba al día siguiente. Incluso el mismo 24 de marzo de 2016, asistieron a la marcha y ya corría la versión de que una de las mamás de los niños del jardín, había desaparecido.

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Dijo entonces que el 23 de marzo la observó a Micaela sentada en una escalinata del establecimiento y que la saludó porque la conocía de muy pequeña, cuando más joven llevaba a sus primeros dos hijos.

La mujer explicó que mientras los pequeños iban ingresando a su sala, ella permaneció tomando nota de las mamás que iban a quedarse al taller, ya que era una modalidad habitual. En primera instancia aseguró que “Micaela no entró, nosotros no nos percatamos de eso, comenzamos el taller, no ingresó al taller”. Según su declaración luego vino una de las compañeras del sector de servicios generales a decirle que había una mamá esperando, por lo que cinco minutos después salió para abrir la puerta y no encontró a nadie. Días después la misma compañera le indicó que esa mamá que esperaba era Micaela.

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Britos reflexionó “que falte tantos días empezó a preocuparnos, nos llamaba mucho la atención, era una madraza, todas estábamos muy revolucionadas con eso, cómo fue, tratamos de reconstruir cómo había pasado, nadie entendía”. Con el deseo de ayudar “pusimos fotos y números de teléfonos en nuestros autos, reuníamos a las familias, les pedíamos que si habían visto algo, si sabían algo, que llamen a la Policía”.

Cuando el testimonio de la directora avanzó, la fiscala Betiana Cendón acudió a una anterior declaración de la misma para refrescar la memoria y entonces Britos aseguró que otra “mamá dijo que Micaela finalmente había entrado al salón y que participó del taller”.

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