Una pericia psiquiátrica ordenada en el expediente revela que una mujer sospechada de haber participado en una serie de delitos sexuales es inimputable, por lo que la voluntad inicial del Ministerio Público Fiscal de acusarla podría quedar en la nada. En el legajo, ya está acusado y detenido un hombre con el que mantenía una relación de pareja.

De acuerdo a la información de fuentes ligadas al caso, el fiscal Martín Govetto no pudo avanzar en la formulación de cargos contra la mujer, ante la presentación de un informe psiquiátrico forense que establece la inimputabilidad de la misma, a partir de su estado de salud mental. No obstante las mismas fuentes consultadas revelaron que habrá una nueva audiencia en la que será citada la especialista que elaboró la pericia, a fin de determinar los pasos a seguir.

En el caso, en el pasado mes de abril, Govetto acusó a un sujeto por una extensa lista de delitos sexuales y tras aceptar los cargos el juez de Garantías interviniente ordenó su traslado al Establecimiento Penal 3 de la ciudad, donde deberá permanecer por los cuatro meses que dura la investigación preliminar.

Pero ya en esa ocasión la madre logró evitar la formulación de cargos en su contra, como participante de varios de los hechos investigados y se ordenó en el caso la realización de la pericia psiquiátrica que por el momento indica que no puede ser sometida a un proceso penal en virtud de su estado de salud mental.
La entidad de los delitos investigados y la edad de la víctima impone al tratamiento del caso un resguardo especial, por lo que los detalles de la investigación y de los protagonistas son reservados.

Govetto acusó al sujeto ante el juez de Garantías Juan Pablo Laurence, y le atribuyó los delitos de grooming -acoso cibernético-, suministro de material pornográfico a una menor de edad agravado por la edad de la víctima -menor de trece años-, distribución de imágenes de una niña con representación de sus partes genitales con fines predominantemente sexuales, como partícipe necesario, todo en concurso ideal con el delito de promoción y facilitación a la corrupción de una menor de edad, agravada por la edad, en concurso real con el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos personas.

La hipótesis inicial es que los presuntos abusos sexuales que son investigados pudieron haber sido registrados en fotografías y videos e incluso luego compartidos a través de internet, por lo que el desenlace del proceso de investigación podría derivar en una causa de alta complejidad y de alto impacto.

El sigilo de los investigadores del caso tiende a la máxima protección de la víctima, menor de edad y en un extremo cuadro de vulnerabilidad, según confiaron fuentes judiciales a El Cordillerano. La fiscalía eligió la cautela para resguardar ciertos elementos probatorios, otras medidas dictadas en el expediente y el avance de la investigación que, aunque prematura, tiene colectada ya una importante cantidad de elementos que incriminan al sujeto y a la madre de la niña.

De las medidas que fueron ordenadas y ya se concretaron, se desprendieron diversas pericias científicas y tecnológicas, tendientes a obtener posibles elementos probatorios en una causa que tiene inicialmente a dos personas sospechadas. Aunque no hubo confirmaciones oficiales, trascendió que las medidas dieron resultados positivos y apuntalaron la acusación que planteó el fiscal Govetto.

En el legajo interviene el defensor oficial Nelson Vigueras y la defensora oficial adjunta Yamile Saidt, además del defensor de Menores Javier Ospital, para resguardar los derechos de los menores victimizados.