Un sujeto que había accedido a una suspensión del juicio a prueba fue definitivamente sobreseído de los cargos que le reprochaban, tras vencer el plazo de la suspensión y haber dado cumplimiento a todas las condiciones impuestas.

Según la acusación, el sujeto estaba imputado por un hecho ocurrido el 5 de junio de 2018 en horas de la tarde, cuando junto a otros dos sujetos se presentó en el domicilio de una mujer y tiraron el pilar de luz correspondiente a la vivienda, cinchándolo a una camioneta blanca, propiedad de uno de los involucrados. Posteriormente amenazaron a la mujer diciéndole que si continuaba llamando a la policía y al SPLIF, iban a prender fuego la casa.

Posteriormente, el 27 de julio de 2018, cerca del mediodía los mismos sujetos se presentaron en el mismo domicilio y tras romper el portón de acceso al terreno y quitar 3 metros de alambrado, colocaron un alambrado de 33 metros y amenazaron a la víctima nuevamente con prender fuego la casa y a la misma víctima. Así, además de los daños y las amenazas, turbaron de la posesión que ejercía la víctima sobre el inmueble en conflicto.

Pero a medida que avanzó el legajo judicial, el involucrado fue beneficiado con una suspensión del juicio a prueba y ahora la defensa reclamó su sobreseimiento definitivo luego de acreditar que había dado cumplimiento a cada una de las condiciones establecidas en la suspensión.

Según se demostró, el sujeto pagó veinte mil pesos a la víctima, se presentó bimestralmente en el Instituto de Asistencia de Presos y Liberados, observó buena conducta y se mantuvo a derecho.

Así las cosas, el juez de Garantías Juan Martín Arroyo analizó que “toda vez que el imputado cumplió con las pautas impuestas al momento de suspenderse el proceso a prueba y no cometió delitos durante el lapso que duró dicha suspensión, corresponde declarar extinguida la acción penal y en consecuencia dictar el sobreseimiento por los hechos por los que fuera acusado”.