Diego Jesús Carballo, Carlos Eduardo Ramos Rodríguez, María del Carmen Correa y posiblemente otras personas no identificadas eran investigados por su participación en un hecho de estafa en el que lograron apoderarse del dinero de un vecino barilochense que creía comprarse un teléfono celular.

La acusación que pesaba sobre ellos indicaba que el 2 de diciembre de 2019 publicaron en Mercado Libre a la venta un teléfono celular con un precio de 15 mil pesos, lo que significaba una verdadera oferta. En una de las fotografías publicadas introdujeron un número de teléfono y lograron establecer contacto con la víctima.

Así le explicaron que pertenecían a la empresa “Phone Store Limited” y le aseguraron que la transacción era segura, incluso ofreciéndole garantía por el producto, de esta forma lograron hacerlo incurrir en error que derivó en un pago inicial mediante transferencia bancaria por el monto original de quince mil pesos argentinos.

Luego con diversas excusas, como que había que destrabar el paquete en la aduana o que por error le habían enviado seis aparatos, el denunciante terminó realizando diecisiete transferencias a diversas cuentas de los imputados, suma que ascendió a 204 mil pesos

Llegado un punto de la estafa, le ofrecieron al damnificado ocho aparatos en compensación, pero advirtiéndole que sería a través de otra empresa llamada “Bestview Electronic Limited”. La víctima se hartó de las mentiras y radicó la denuncia.

La investigación fiscal avanzó y finalmente logró resolverse a través de un criterio de oportunidad, en la que las partes estuvieron de acuerdo. Así, tras la audiencia de rigor en la que la fiscalía instó el sobreseimiento definitivo de los acusados por haber sido resuelto el conflicto primario, el juez que actuó en la causa decretó el final del caso, aclarando que la sustanciación del proceso no afectó el buen nombre y honor de los imputados.