El tema de los residuos patógenos siempre ha tenido gran importancia y mucho más aún, en tiempos de COVID.

Analy Potes Mungai es encargada del servicio de recolección de estos residuos de Zavecom S.R.L.; en el programa "El Expreso Periodístico" por El Cordillerano Radio (FM 93.7), habló del recorrido de los mismos.

Esta empresa ganó la licitación por la concesión del servicio. “Trabajamos en todo Río Negro sirviendo tanto a públicos como a privados, depende de la cantidad de kilos que se generan y con las frecuencias que el generador necesite”. Esto determina los recorridos semanales que realiza un camión que está habilitado por Provincia y por el Ministerio de Desarrollo Sustentable de Nación. Además estos entes son quienes autorizaron a un chofer determinado para el traslado. Todo lo recolectado va hacia General Roca donde está la planta de tratamiento que también pertenece a Zavecom.

“Son residuos especiales y potencialmente peligrosos, se catalogan con una Y que es a lo que hace su categoría y lo que hacemos es transportar y tratar distintas corrientes de residuos”, explicó.

El patógeno común debe estar dentro de una bolsa que provee la empresa, “de color rojo y de un micraje especial de hasta 120 milímetros para que no pueda tener derrames ni generar problemas con la persona que la está manipulando dentro del hospital o de quien la traslada”.

Esa bolsa se cierra con un precinto de seguridad y el chofer recolecta con todos sus elementos de protección personal para que sea seguro. Con los residuos de COVID se hace un doble embolsado por lo que no reviste mayor peligrosidad si se trata de la manera que corresponde.

Durante la pandemia ha crecido en un 40 por ciento la cantidad de residuos “tiene que ver con material que no genera kilaje pero sí en volumen, como la indumentaria que utilizan para atender a los pacientes de COVID” dijo.

Todos los elementos punzantes y de vidrio se ponen en contenedores especiales, “hay uno de agujas y otro de vidrios que cuando se cierran son herméticos y de material resistente para que no puedan perforar hacia afuera y lastimar a quienes los manipulan”. Si la persona es responsable y cumple con todos los pasos no hay ninguna clase de inconvenientes.

En Bariloche tienen aproximadamente 190 clientes, “consultorios médicos, odontológicos, geriátricos, podólogos, estéticas, laboratorios, clínicas, centros de salud y el Hospital Zonal”.

En General Roca cuentan con un horno autoclave, “por presión de vacío y calor de vapor descontaminan el residuo equiparándolo a uno sólido urbano, se autoclavan y luego se transportan a las celdas de seguridad”.