Nueve músicos y músicas que hacen historia

Salvo formaciones que se originaron para afrontar compromisos puntuales, los registros recientes no acusan la existencia de un proyecto similar a La Parabadum.

Si bien la pandemia está lejos de superarse, La Parabadum Orquesta Típica piensa apretar el acelerador. “Nos proponemos tener rodaje, encontrar instancias para poder tocar y fortalecer la musicalidad del grupo”, avisó Alejandro Otsubo, bandoneonista e impulsor de la experiencia. “Estamos trabajando en eso y cuidando la imagen de la orquesta, tratando de lograr un buen sonido, que se construye a través del estudio y de la buena relación que se puede generar entre todos los que estamos participando”, resaltó.
La formación se presentará el domingo (14 de febrero) desde las 18, en el Anfiteatro de Colonia Suiza, al aire libre y a la gorra. Había que indagar sobre tan llamativo nombre. “Surgió en un ensayo. Estábamos con la dirección de Humberto (Taglialegna–ver aparte) y a modo de ejercicio, para que entendiéramos cómo tocar una línea melódica, buscaba una forma de decirla para que la cantáramos. Por ejemplo: parabadum. Así tenía que sonar, aunque las notas fueran do, re, fa o equis. En ese juego, quedó el nombre bollando y lo adoptamos”, explicó el músico.
Al principio, “fue una decisión temporal, pero no surgió un nombre mejor, porque también le esquivábamos al cliché de las orquestas de tango”, compartió Otsubo. “Nos gustó en ese momento, no apareció otro que lo reemplazara o mejorara y creo que ya estamos identificados con ese nombre. Hemos construido una identidad a su alrededor, por eso hablamos de La Parabadum”.
La típica de Bariloche forma con Marisa Di Giambatista (piano); Julieta Mercado (primer violín); Zari Gallego (segundo violín); Magui Oyarzo (tercer violín); Tomás Barros (viola); Daniela Nieves (violonchelo); Pablo González (bandoneón); Alejandro Otsubo (bandoneón); Mauricio Beltrán (contrabajo); la dirección de Humberto Taglialegna y Nicolás Malbos; más Marcela Ojeda como cantante invitada.
Haría falta una mayor indagación, pero Otsubo tiene una impresión que el autor de estas líneas comparte. “Creo que es la primera orquesta típica que se arma, se sostiene en el tiempo y funciona en Bariloche. Que yo conozca, solo hubo presentaciones muy puntuales para algún festival, pero una orquesta con estas características, sería la primera”. Capaz no fue su intención, pero La Parabadum ya está haciendo historia.

Adrián Moyano