Tarana Burke: Con un simple “Me Too” creó un movimiento de esperanza

Tarana Burke es la voz de muchas mujeres víctimas de violencia sexual. Ella misma la sufrió cuando era niña. Su madre la apoyó y le dio contención. Pasaron muchos años hasta que en el 2006 se animó y lo pudo decir en público: “Me Too” (Yo también). Una simple frase, que se tornó viral, atravesando generaciones, clases sociales, fronteras. Dos palabras que se transformaron en un formidable movimiento de esperanza, resiliencia y poder transformador.

Los abusos y las agresiones sexuales pasaron a primer plano y cambio de alguna manera la forma en que el público percibió estos delitos. Las víctimas fueron más creíbles y los agresores condenados en mayor medida tanto por la justicia como por la sociedad.

Ella trabajó con sobrevivientes de violencia sexual, desarrolló en el 2003 una organización sin fines de lucro para jóvenes negras entre 12 y 18 años llamada "Just Be". En la actualidad es directora de la organización benéfica “Girls for Gender Equity” que organiza talleres de ayuda para mejorar las políticas en las escuelas, los lugares de trabajo y los lugares de culto, y se centra en ayudar a las víctimas a no culparse por lo que sufrieron. Además, asiste a eventos dando charlas en todo el país promoviendo la empatía.

“Yo también” puede parecer un pequeño paso. Es gigantesco.

Por José Luis Goin