Camila Warner cumplió con sus planes

La joven cantautora logró su primer álbum, que es además disco compacto. Su intención es presentarlo a mediados de enero, con todos los cuidados sanitarios que estén vigentes.

Como aquellos discos que en los 70 o en los 80 arrancaban con el single más popular, “Sureña” empieza con “Somos”, el tema que más estremece de Camila Warner. La joven cantautora cumplió con sus planes a pesar de la situación sanitaria: cuando hablara con El Cordillerano en febrero último, avisó que durante 2020 avanzaría hacia su primer álbum y precisamente, fue el objetivo que cumplió. Inclusive, en formato de disco compacto.

Una canción con aire folklórico apenas, “Somos” define con precisión dramas pasados y postergaciones presentes de las y los patagónicos, con escala en algunas características barilochenses: “Somos el desierto tristemente conquistado / somos el silencio más reciente de la historia / somos el destino más feliz del egresado / somos un verano sin Santiago y sin Nahuel”, canta Warner con una voz cuidada y dulce que no amortigua en nada sus denuncias.

La pertenencia patagónica se reafirma en “País lejano”. Exintegrante del Coro de Niños y Jóvenes Cantores, Camila migró como tantas jóvenes barilochenses, en la búsqueda de profundizar académicamente su talento musical.

Pero lejos de generar desarraigo, la distancia acentuó identidades precisamente sureñas en sus temáticas, reflexiones y semblanzas. Música sutil y elegante en la que aportó producción y arreglos José Torelli, además de encargarse de las guitarras.

“Para diciembre” reafirma la identificación porque celebra la llegada de ese momento, que implica el retorno transitorio de cada año al pago chico. Además de Warner y Torelli, grabaron “Sureña” Diego Gazzaniga (batería); Facundo Canosa (piano); Romina Vega Soto (cello) y Solana Biderman (bajo), con gran solvencia. A pesar de ver al mundo desde el sur, algunas de las composiciones propias de la cantautora son zambas o chacareras, siempre con sonido contemporáneo.

“Huella blanca” rememora una nevada con conmovedora poesía y “Florcita de amancay” realza colores y no por nada: es el único de los temas que la música ideó durante el aislamiento que siguió a la llegada de la pandemia. Con una versión de “Quimey Neuquén” se interrumpe la seguidilla de temas propios que en realidad, son considerable mayoría en “Sureña”. Una recreación intimista del clásico regional.

Climas australes

En “A voz”, Warner retoma la senda propia, junto al gran concurso de Fernando Checchi en flauta, puro clima. El final de “Sureña” se integra con “Al sur de cielo” y con “Relatos de un pehuén”, contribuciones de otros autores (Arroyo – Rodríguez y Lito Gutiérrez, respectivamente) al repertorio del cancionero patagónico más sentido. Siempre con búsqueda poética y delicada musicalidad, con tranquila intensidad.

Como decíamos, “Sureña” es disco compacto y está disponible en el local del Colectivo de Diseño (kilómetro 8 de Avenida de los Pioneros). “También lo dejé en Auto-Warner (Ruiz Moreno 487), donde venden cosas para autos pero es el negocio de mi papá”, le dijo la cantautora a El Cordillerano, mientras sonreía. Además, “ando repartiendo. Cuando la gente no tiene para escuchar discos pero lo compra, les mando un link de descarga para que se pueda escuchar desde cualquier dispositivo. Y en un poquito más de un mes, va a estar todo subido a las plataformas”, anticipó.

Como dice “Para diciembre”, Warner ya está en Bariloche –reside habitualmente en Buenos Aires- y quizá pueda aprovechar su estancia para concretar una presentación en vivo de su primer disco. “Estoy trabajando en eso. La idea es alrededor del 20 de enero pero dependo mucho de las disposiciones que haya, porque no quiero hacer nada irresponsable. Si se hace, va a ser algo muy chiquito y con poca gente, acatando todas las medidas para cuidarnos. Esa es la intención”, anunció. Que se cumpla el anhelo.