Crece la polémica entre Sitrajur y jueza Piccinini

El dirigente judicial Pablo Barreno, que además es legislador rionegrino, lanzó duras críticas hacia la presidenta del Superior Tribunal de Justicia, luego de que ésta ordenara abrir una investigación para determinar si el propio Barreno y otros representantes gremiales, habían violado el asilamiento obligatorio al presentarse en los tribunales de Viedma, con intención de verificar el trabajo de los compañeros en el marco de la emergencia sanitaria.

Según expresó Barreno a la prensa en Viedma, Liliana Piccinini, “propició una embestida judicial contra mi persona y otra autoridad de Sitrajur, por el simple hecho de pretender verificar las condiciones laborales y los protocolos sanitarios de los trabajadores y trabajadoras del poder judicial. Claramente se trata de una persecución basada en un profundo desprecio a los trabajadores y a sus expresiones de organización institucional y política”.

El secretario general de la seccional de Sitrajur en Viedma, secretario gremial en la Federación Judicial Argentina, secretario general de la CTA Zona Atlántica y legislador provincial del Frente de Todos, agradeció el respaldo “recibido de parte de organizaciones sindicales, políticas y sociales; de dirigentes, trabajadores y trabajadoras de Viedma, de todos los puntos de Río Negro y de otras provincias de nuestro país” y castigó duramente a Piccinini al decir que “Evidentemente, es una expresión residual de un tiempo que ya estamos dejando atrás”.

El cruce entre Barreno y Piccinini es reciente, pero ha tenido otros anteriores capítulos a lo largo y ancho del territorio provincial. En la ocasión, la puja se da en el marco del regreso paulatino de trabajadores judiciales a la actividad, bajo un estricto protocolo sanitario que se confeccionó desde la cúpula del Poder Judicial.

El día lunes pasado, se concretó el regreso a la actividad presencial de funcionarios y magistrados, además de trabajadores que cumplirán su labor en los diferentes edificios judiciales, bajo una serie de pautas sanitarias y condiciones de Seguridad e Higiene que según las autoridades judiciales, están verificadas.

Pero en su interés por conocer el respeto a esas condiciones establecidas en un protocolo, dirigentes gremiales se presentaron en la sede de Laprida y 25 de Mayo, Viedma, siendo impedidos de ingresar al edificio por parte de personal policial apostado en las puertas de ingreso.

Como derivación de esa situación, Piccinini ordenó la remisión de un acta labrada en el momento, para que el procurador general Jorge Crespo evalúe si corresponde atribuir a los dirigentes, Barreno y Adriana Saber, la violación al aislamiento obligatorio que se dispuso a nivel nacional.

Pero Barreno y Piccinini habían tenido un áspero cara a cara años atrás en Bariloche. Fue un día en el que juraban nuevos fiscales y el Sitrajur montó una ruidosa protesta por la cesantía de un trabajador precarizado del área de mantenimiento del edificio Pilmayquen.

Las dificultades para desarrollar el protocolo para el juramento, motivaron a Piccinini a encarar a los trabajadores y allí mantuvo un fuerte cruce con Barreno, frente a todos los trabajadores que participaban de la protesta, otros funcionarios que asistían al acto, e incluso periodistas que pidieron registrar el tenso momento.

Ahora, mientras el Sitrajur pide la reapertura inmediata de las negociaciones paritarias, con la intención de discutir condiciones laborales y salariales, la cúpula del Poder Judicial se llamó a silencio e intentó eludir la polémica. Además, contaron con cierto aval de la delegación de trabajo de Viedma, que aseguró que inspeccionó los edificios judiciales de Viedma y se verificó el cumplimiento de los protocolos que se imponen por la emergencia sanitaria.

En tanto, en Bariloche, donde los edificios judiciales carecen de aptitudes de todo tipo para la tarea que allí se desarrolla, la convocatoria al personal ha sido mínima y la actividad se mantiene a menor ritmo que en otras localidades de la provincia, con el sostenimiento del teletrabajo que se impuso en tiempos de pandemia.

Mariano Colombo