Jorgelina Paravano y el reto de hacer teatro en cinco minutos

La propuesta de la actriz fue seleccionada para la iniciativa del Ministerio de Cultura de Nación que implementa Provincia. Procurará romper “un poco lo obvio del mensaje”.

La actriz y directora teatral Jorgelina Paravano también está en la nómina de barilochenses que participan de “Cultura Argentina en Casa”, una iniciativa que reúne al Ministerio de Cultura de la Nación con la secretaría rionegrina del rubro. Integrante de Baco Compañía Teatral y también de Mezclum, la teatrera tendrá cinco minutos para concretar su aporte dramático y que la gente pueda disfrutar teatro desde sus hogares, aunque en formato audiovisual.

“Voy a producir un contenido para el cual tomé textos de dos obras y un poco que agregué yo”, le dijo Paravano a El Cordillerano. Los textos son “de Santiago Loza y de Xavier de Maistre”, el último, un escritor saboyano del siglo XVIII. “Uno habla sobre la espera y el otro sobre un viaje dentro de su habitación. Hice una reacomode de fragmentos de acuerdo a la temática que busca representar la convocatoria y de acuerdo a lo que me interesaba mostrar”, describió.

Avisó la actriz que la idea “es que tanto los textos como la interpretación física rompan un poco con lo obvio del mensaje. Si bien debe haber una conclusión final que tiene que ver con el quedarse en casa, me interesa que se vea un cuerpo extra-cotidiano, diría (Eugenio) Barba, textos que nos hacen salir de lo realista. Ello acompañado de música local”, completó. El mencionado es un director y teórico teatral de origen italiano, uno de los creadores del concepto de antropología teatral.

También comentó Paravano que “a la música la tengo casi, casi definida pero llegará más concretamente luego de ver el producto filmado”. La actriz aspira a una relación “quietud y movimiento. Contrastes... Desde lo dramatúrgico hasta lo corpóreo. Todavía no está filmado, está en proceso, pero esa es la idea. Incluso de Nación están concretando formatos aún”, comentó. Quiso transmitir que desde los autores de la convocatoria, aún no está del todo definida la modalidad en la que deben presentar sus trabajos los participantes, más allá de saberse que se trata de contenidos audiovisuales que se reproducirán a través de redes sociales.

Sacar al teatro del escenario para estrecharlo en los límites de una cámara. “es todo un tema para mí”, lamentó la actriz. “Imaginate que recién voy a hacer una prueba back up de dictado de taller la semana que viene, es decir, todo lo que es teatro virtual o utilización de este medio que se viene dando, es más bien por la necesidad de seguir manteniendo viva la llama que por la efectividad de lo tecnológico en este sentido. Incluso, intenté ver una obra de teatro por Teatrix y me resultó aburridísima, aunque muy bien filmada”, admitió.

Todo un desafío

La incursión forzada en otros lenguajes y tecnologías es “para mí todo un desafío, porque manejo muy poco todo lo que sean aplicaciones o programas audiovisuales, ya sea por la mala señal o por un teléfono insuficiente. Tanto que terminé proponiéndole a una amiga y compañera, Virginia Salamida, que me acompañara en el proceso de filmación y edición. Para que salga algo bien armado, está bueno recurrir a los que saben y poder poner la energía en lo mío”, proclamó.

Paravano encuentra justificada la apertura. “Soy muy exigente con mi trabajo y por más que sean 5 minutos, quiero estar conforme con el producto terminado. Yo elegí esa opción, pero hay muchos artistas que en este formato se encuentran cómodos porque incluso lo vienen haciendo de antes. También me gusta la idea de darle una ayudita a alguien que trabaja de eso, así que viene compartida la cuestión”, subrayó.

Con respecto a la convocatoria de “Cultura Argentina en Casa”, la teatrera decidió “tirarse el lance” también ante “la necesidad de producir ingresos, aunque estaba con bastantes contradicciones con la propuesta: 1 minuto de presentación para seleccionar a tan solo 15 artistas de toda la provincia, me hacía mucho ruido, habiendo tantos y tan buenos… Por otro lado, si bien agradezco que existan estas iniciativas, me parece que hay instancias en las que la selección no debería existir, si se tiene en cuenta el contexto”. Los postulantes debían explicar sus propósitos en un video de aquella duración.

El lance se explica porque “a nivel laburo y proyectos tuve que bajar miles de cambios. Tenía previsto el estreno el 18 de abril de una nueva obra que estoy dirigiendo con Mezclum, que se llama ‘Pluma y la tempestad de estos tiempos’. Por otro lado, con Baco comenzamos con dos nuevas producciones y además, comencé un trabajo unipersonal con Darío Levin, por lo que viajaba a Lago Puelo una vez a la semana. También había comenzado con mis dos talleres de teatro: Biblioteca Sarmiento y Araucanía. Venía haciendo todo esto antes de la cuarentena, además de otros laburos”, repasó. Pausa forzada a la hiperactividad. ¡Cuándo Paravano vuelva a poner primera!

Amigarse con la presencia corpórea

El aislamiento “me significó un decaimiento a nivel producción artística muy grande, por más que seguimos conectados por algún medio como Zoom”, explicó Jorgelina Paravano. En forma simultánea, “empecé a extrañar muchísimo el hecho de dar clases, es algo que me satisface enormemente. Me voy llena de energía del intercambio con la gente, de ver lo que produce el teatro en los demás y en mí”.

Pero más allá del comprensible bajón, “por suerte, podría decir que no se frustró ningún proyecto sino que más bien, se postergó. Eso hace que en cierto punto, uno no sienta bronca por lo que está pasando. En cambio, sí siento incertidumbre porque las artes escénicas, sean clases, funciones o ensayos, van a ser de los últimos sectores en volver a la normalidad. Y si hay algo que necesitamos los artistas y creo que todes (sic), es la necesidad del contacto y la confianza. Será un punto no menor a retomar: la confianza en el otro y la mirada cómplice. Ahora siento que muchos nos miramos como diciendo: ¿vos que hacés fuera de tu casa? Tenemos que volver a amigarnos con la presencia corpórea”, invitó.

Adrián Moyano