Malala Yousafzai, por los derechos de los niños a educarse

A los 16 años Malala Yousafzai recibió un balazo, el 9 de octubre de 2012. Iba en un autobús escolar cuando dos terroristas talibanes le dispararon con un fusil hiriéndola en el cráneo y cuello. Era famosa a pesar de usar seudónimo (Gul Makai) por escribir en un blog de la BBC reclamando por los derechos de las mujeres a educarse. A pesar de su estado delicado se recuperó para lo cual le tuvieron que agregar una placa de titanio y un implante cloquear en su oído izquierdo. Continuó sus estudios exiliada en Londres. “Volver al colegio me hace muy feliz. Mi sueño es que todos los niños en el mundo puedan ir a la escuela porque es su derecho básico”. Para ello creo Malala Fund.

Cinco años después regresó a Pakistán donde fue recibida por el primer ministro. Alternó palabras en urdú, pastún e inglés para comunicar la emoción del reencuentro y comprobar la dura realidad. Siguieron las matanzas en escuelas y universidades como el atentado del 2014 en un colegio de Peshawar donde murieron 125 niños. Human Rights Watch denuncia que 25 millones de menores pakistaníes no asisten a la escuela por miedo a los ataques. La mitad de las mujeres paquistaníes son analfabetas.

Recibió el premio Nobel de la Paz 2014 junto al indio Kailash Satyarthi.