Jazz Jenning, soñaba que un hada le transforme el cuerpo

Era un niño al que le gustaban las muñecas y los vestidos de princesa. A los tres años le diagnosticaron disforia de género. A los cinco festejó su cumpleaños como niña, a los seis se presentó en un programa de televisión polemizando con su conductora. Sus compañeros de escuela estaban desorientados, no se sentaban a su lado. Las autoridades no le permitían usar el baño de niñas, tampoco el de niños, debía recurrir al baño de la enfermería. Al llegar a su casa se ponía a llorar. Se sentía aislada. Tenía la fantasía que un hada le transforme el cuerpo. De a poco logró tener un grupo de amigos.

Fue perseverante y a los 16 creó la Transkids Purple Rainbow Foundation para ayudar a personas con su misma situación. Escribió su autobiografía, una fábrica lanzó la primera muñeca transgénero basada en ella, tiene su canal de You Tube con 500.000 seguidores, es uno de los iconos de la comunidad LGBTQ. “Espero que ayude a colocar a las personas transgénero en un lugar positivo y demostrar que somos iguales a cualquier otro”, dice esto mientras en las redes sociales algunos la insultan y le desean la muerte. Es una cuestión de ignorancia.

A los 18 años se realizó una operación de cambio de sexo. Jazz Jenning se acordó del hada de su niñez.