DEL BARRIO NUESTRAS MALVINAS

| 07/11/2019

Integrantes del Centro de Abuelos El Pinar fueron a pasear a Catedral

Susana Alegría
Integrantes del Centro de Abuelos El Pinar fueron a pasear a Catedral

Integrantes del Centro de Abuelos El Pinar, pasaron una jornada maravillosa en el cerro Catedral, en el marco de una propuesta de un dirigente vecinal ante el EAMCEC.

Son muchos los adultos mayores de nuestra ciudad que nunca han realizado alguna excursión para conocer los puntos turísticos más importantes del maravilloso entorno en el que vivimos.

En esta oportunidad y gracias a una propuesta de Sergio Herrero, quien integra el Ente Autárquico Municipal Fiscalizador de la concesión del cerro Catedral (EAMCEC) los integrantes del centro El Pinar del barrio Nuestras Malvinas, pudieron pasar una jornada maravillosa en el cerro Catedral.

Dicha propuesta fue muy bien recibida por las autoridades que integran el ente por lo que ahora será el turno del Cooperativa 258 y luego El Pilar.

Contaron con el transporte dispuesto por el municipio, llevaron algo para compartir y con equipos de mate y muy buena onda, vivieron un día simplemente inolvidable.

Aunque para algunos barilochenses y turistas es muy simple acceder al cerro, para la mayoría de estos adultos mayores no lo es, muchos están solos y con problemas de movilidad que les impide ir por sus propios medios. La situación económica lleva también a que ni siquiera esté en sus planes una excursión y hablamos de gente que lleva 60, 70 o más años viviendo aquí.

Felicitaciones a quienes lo hicieron posible y seguramente mucha más gente esperará su turno para disfrutar de nuestros paisajes.

El Centro de Abuelos

El Centro de Abuelos El Pinar funciona en la casa particular de Susana Mansilla, ubicada en la calle Puerto Argentino 7134 del barrio Nuestras Malvinas. Concurren aproximadamente 20 adultos y adultas mayores para compartir cosas ricas y dos días a la semana, se quedan a participar de los talleres que se les ofrecen.

Han aprendido técnicas con papel, telas y materiales reciclados, pero siempre reciben de muy buen grado, las donaciones de témperas, cartones, pegamentos o lanas. Asimismo aquellas personas que deseen compartir algunas horas con ellos, solo tienen que acercarse, teniendo en cuenta que la soledad y la tristeza, son los mayores enemigos con los cuales se enfrentan día a día. Siempre están dispuestos a salir a pasear y esos momentos los viven como algo muy especial.

Susana Alegría

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