31/10/2019

El muro de Berlín (1989-2019), una mirada filatélica

José Luis Goin

Previo a la finalización de la Segunda Guerra Mundial las potencias aliadas reunidas en Yalta se dividieron el mundo incluyendo el desmembramiento de Alemania en dos, y en especial a su capital Berlín, en cuatro. Al poco tiempo Estados Unidos, Francia y el Reino Unido unificaron sus dependencias creando la República Federal Alemana (RFA) mientras que la Unión Soviética forjó la República Democrática Alemana (RDA) en 1949. A medida que la guerra fría se fue recalentando la frontera Este-Oeste, comunista-capitalista, fue tornándose más problemática.

Un alto, oscuro y cruel muro comenzó a materializar esta separación a partir del 13 de agosto de 1961. Fue la terrible solución que usó el gobierno del Este con el pretexto de defenderse del fascismo occidental, pero cuyo verdadero propósito fue evitar las numerosas fugas de habitantes. Se estima en tres millones y medio los alemanes que cruzaron antes de su construcción, un veinte por ciento de la población de la RDA. Las consecuencias fueron brutales cobrándose familias desgarradas, amistades interrumpidas, detenidos, heridos y muertos. Los paraísos no necesitan murallas.

Varios historiadores sostienen que las potencias occidentales no hicieron lo suficiente para impedirlo. La decisión al principio los tomó por sorpresa, pero nada impidió que se construyeran 155 kilómetros de murallas.Una estampilla de Dominica (1988) nos recuerda la visita del presidente norteamericano John F. Kennedy el 26/6/1963 al muro consumado, en donde pronuncia su famoso discurso Ich bin ein Berliner (Soy un berlinés).

A lo largo de varias décadas hubo distintas instancias intentando atemperar sus consecuencias. Poco a poco el poderío económico soviético se fue deteriorando y los países de la cortina de hierro fueron ganando mayor autonomía. Fue imposible intentar frenar la marea libertaria. El presidente soviético Mijaíl Gorbachov, con su política de perestroika (reestructuración económica) y glásnost (transparencia), impulsó un cambio de rumbo cuya consecuencia indirecta fue que un día, tanto de un lado como del otro, se animaron a derribar el muro a martillazos. Esto sucedió el 9/11/1989. A pesar del fervor del pueblo germano la reunificación alemana demoraría unos cuantos meses más.

La estampilla de Dominica que recuerda a John F. Kennedy.

 

Bolivia, país precursor

El primer país que emitió una estampilla con este acontecimiento fue Bolivia (18/3/1990), “acontecimiento trascendental para la paz mundial” dice la hoja suvenir con motivo de la visita del presidente de la RFA a La Paz. Entre las dos Alemanias había tres administraciones de correo: RFA, RDA (cuyas siglas en alemán son las características DDR usadas en sus estampillas) y Berlín.

La estampilla que se emitió en Bolivia.


A 40 AÑOS DE LA CAÍDA DEL MURO

Algunas curiosidades filatélicas entre ese día y el de la plena unificación

500 años

El 12/1/1990 cinco administraciones celebraron los 500 años de las rutas postales internacionales de Europa (RDA, RFA, Berlín, Bélgica y Austria)

Berlín 500 años de Correo l RFA 500 años de Correo l RDA 500 años de Correo

Rápida reacción

El 9/10/1989, un mes antes de la caída del muro, en la ciudad Leipzig -de unas 70.000 personas- se reunieron frente a la iglesia Nikolai y luego fueron a la plaza Karl Marx bajo el lema “somos el pueblo”. Fue el inicio del cambio. Una estampilla emitida por la RDA, insólita por el motivo y la inmediatez emitida el 28/2/1990.

 

Pocos lo imaginaban

Otra emisión impensada para un país comunista fue el homenaje a un papa católico, con la excusa de los 70 años de Juan Pablo II, considerado uno de los artífices de la caída de la cortina de hierro.

A partir del 21/6/1990 las emisiones de la RDA cambiaron la sigla emblemática DDR por Deutsche, unificando la designación de origen.

La estampilla con la imagen de Juan Pablo II.

 

Marco alemán

El 1/7/1990 el marco alemán era la moneda de curso legal en ambos países. Probablemente la emisión por el “Año internacional de la alfabetización” se haya impreso mucho antes, razón por la cual se reselló con nuevos valores y quedó el DDR. Esta fue la excepción al tema de las denominaciones.

La que se emitió en el “Año internacional de la alfabetización”.

 

Tiempo de libertad

El 27/9 fue la última estampilla emitida por la administración de Berlín y el 2/10 la última de la RDA. El 3/10/1990 a la medianoche se proclamó frente al Reichstag la reunificación. Se tocó la Campana de la Libertad, se izó la bandera, cantaron el himno y el presidente de Alemania Richard von Weizsäcker leyó el artículo 23 de la Ley Fundamental. Berlín era una fiesta y el correo no fue ajeno a ello.

 

A un año de la caída del muro


El 6/11/1990 se emitió un homenaje al primer aniversario de la apertura del muro de Berlín.

José Luis Goin

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