Impugnaron el fallo que habilitó la formulación de cargos contra la madre acusada de asesinar a su bebé

El defensor oficial Marcos Cicciarello impugnó la decisión adoptada por el juez Bernardo Campana en relación a habilitar la formulación de cargos para la joven madre acusada de haber asesinado a su bebé a poco de dar a luz.

En un extenso escrito cuestionó la decisión que adoptó Campana, al revocar la decisión de su colega Romina Martini que había negado la posibilidad de que se formulen cargos a la joven, declarando la invalidéz de varias pruebas ofrecidas por la fiscalía.

El caso del homicidio del bebé recién nacido seguirá con seguridad transitando en intrincado laberinto judicial. Aún el caso no ha superado la primera instancia del proceso, la formulación de cargos, y los proceso de apelación e impugnación ya demoraron más que lo que demoraría un juicio convencional en una causa común y corriente.

Tras conocerse el hecho, promediando el mes de mayo pasado, la fiscalía presentó formalmente la acusación contra la joven sospechada de haber asesinado a su bebé, en el interior de la habitación que ocupaba en una vivienda de la zona Este de la ciudad. Pero su pedido de habilitar formalmente la investigación fue rechazado por la jueza de Garantías Romina Martini, que declaró ilegal parte del material probatorio aportado y ordenó la presentación de una nueva acusación que omita esos elementos declarados inválidos.

Pero la fiscal Betiana Cendón impugnó la decisión y obtuvo la corrección que buscaba por parte del juez de juicio en rol de juez de revisión Bernardo Campana. Esa última decisión es la que ahora impugnó la defensa oficial de la sospechosa.

En su escrito, la defensa señala que el fallo carece de perspectiva de género, que se aparta de lo que prescribe la Constitución Nacional y el Código Procesal Penal, además de omitir la aplicación de doctrina de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. También señaló que la sentencia resultaba arbitraria.

Según la acusación el hecho se produjo el 12 de mayo en un horario comprendido entre las 15 y las 21, en el interior de la habitación que la joven ocupaba en el domicilio que compartía con su hermana, su madre y su padrastro.

La fiscalía señaló que tras el alumbramiento de un niño de 3,400 kilos, la joven le colocó al bebé un papel y una gasa en la boca para obstruir las vías respiratorias, luego le asestó unas diez puñaladas y finalmente lo ahorcó con una bombacha. Tras ello ocultó el cuerpo dentro de dos bolsas de tela de supermercado y lo ocultó dentro del placard.

La situación sería advertida dos días después luego de una segunda presentación de la joven en el nosocomio local, para recibir asitencia a consecuencia de una hemorragia. Las autoridades detectaron en su cuerpo señales contundentes de un parto reciente y dieron aviso a las autoridades, que recorrieron el domicilio y encontraron al bebé asesinado en el placard.

Pero la defensa cuestionó varios de los elementos de pruebas surgidos de la averiguación realizada por la fiscalía. En primer término acusó que se utilizó la necesidad de asistencia médica de la joven para incriminarla en un delito, que se inspeccionó su domicilio de manera ilegal, porque no medió autorización de un juez y el consentimiento que otorgó la hermana de la sospechosa fue torcido por los pesquisas y porque además se interrogó de manera ilegal a la joven mientras estaba internada en el Hospital.

Parte de ello había sido aceptado por la jueza Martini al desestimar la acusación, pero Campana recibió testimonios en varias audiencias que se prolongaron por semanas y entendió que Martini no había tenido a su vista toda la prueba colectada y que a la luz de todo lo escuchado en esas audiencias que presidió, correspondía revocar su decisión y mandar a realizar una nueva formulación de cargos.

Mariano Colombo