18/06/2019

Reverdeció el espíritu de la autogestión con el primer Encuentro del Libro y Sonidos Independientes

Reverdeció el espíritu de la autogestión con el primer Encuentro del Libro y Sonidos Independientes

Además de los puestos de libros, discos, parches y remeras, hubo varias disertaciones que motivaron la reflexión sobre Bariloche y la Línea Sur. Objetivo cumplido.

Está bien que se recuerde a los 90 como una época de exclusión, de pobreza y retroceso general de los derechos, tanto económicos como sociales. Pero hay quienes también pueden evocar a esa década como un período de efervescencia creativa, de puños crispados e interminables pogos. Los Simios Librepensadores están claramente parados en el segundo segmento y el último sábado, hicieron ondear de nuevo la bandera la autogestión, durante el transcurso del primer Encuentro del Libro y Sonido Independientes.

Las cosas sucedieron en un local gremial de la calle Anasagasti, que si bien no quedó del todo chico, hizo que por momentos, desplazarse entre los puestos exigiera precauciones.

Una fila a cada lado con remeras de impresión artesanal, libros, muñequitos con la silueta de Los Ramones, fanzines, historietas, más libros, artesanías, discos legales y de los otros, expresiones plásticas originales o reproducciones, banners y no pocas banderas con calaveras.

El viejo lema punk -Do it yourself- reverdeció pero no solo para cultores del subgénero, sino también para metaleros, recitadores barriales, cantautores populares, docentes e investigadores, trabajadores sociales y una amplia grey que soslayó pérdidas de tiempo futboleras -por la tarde, perdía la Argentina frente a Colombia- para privilegiar el objetivo del asunto: el encuentro cara a cara y la circulación de la palabra, más allá de los mandatos tecnológicos.

A pesar de la estética predominante heavy-punk, el más respetuoso de los silencios se adueñó del espacio cuando el contingente que había llegado de varias localidades, comenzó a presentar el libro “Mujeres del viento. Historia de vida de mujeres de la Línea Sur de Río Negro”. En realidad, primero se escucharon varios audios porque a fin de cuentas, el trabajo se conforma también con un CD que permite arribar a los relatos sin necesidad de la lectura.

El volumen se dio a conocer como hecho concreto del proyecto que llevó a cabo un grupo de trabajadores sociales, residentes en Los Menucos, Maquinchao, General Roca e Ingeniero Jacobacci. En primera instancia, se recogieron “los relatos crudos” a partir de entrevistas y trabajo de campo que se concretaron durante 2018. El objetivo consistió en “recuperar y visibilizar las historias de vida de 18 mujeres”, vecinas de diversos parajes.

Salir de la victimización

Aquellos relatos se grabaron y cuando las involucradas aceptaron, también se dejaron fotografiar en sus casas y con sus nombres. El propósito de las impulsoras fue que las protagonistas pudieran salir del “lugar de victimización” donde habitualmente, se sitúa a las mujeres de Línea Sur, para resaltar su fortaleza, su condición de “mujeres protagonistas de sus vidas” y “luchadoras”, tanto en los barrios como en las zonas rurales.

Las recopiladores se hicieron de un puñado de relatos “difíciles de escuchar, de historias muy duras, cosas que nos han dejado la Conquista del Desierto, la ausencia del Estado y la violencia colonial”, confió Soledad Elifonso, una de las portavoces del grupo. Crucial en el proyecto fue la presencia del Instituto de Formación Docente de Fiske Menuko (General Roca), cuyo anexo funciona en Los Menucos.

El libro tiene su vuelo literario porque a partir de los relatos iniciales y bajo la guía de docentes de literatura, se elaboraron 32 textos, en formato de cuento o de relatos, que hacen más llevadera y hasta hermosa la aproximación a esos universos de “maternidades apresuradas”, despojos de campos y apropiaciones de niñas, aunque también de resistencias y permanencias culturales. También tomaron parte de la presentación María José Catalán y Angie Tgmozka, entre otros participantes de la iniciativa. Cerrados aplausos saludaron las lecturas.

Después de una breve pausa en la que volvió a sonar la distorsión en la música-ambiente, tuvo su momento Abel “Gorrión” Pérez, histriónico recitador que ya se había hecho presente un par de semanas atrás en el Encuentro de poetas La luna con gatillo. En esta ocasión, Pérez compartió una enérgica interpretación adaptada de “La maldición de Malinche”, tema que popularizara bastante antes de los 90 la mexicana Amparo Ochoa, aunque su autoría corresponde a Gabino Palomares, su compatriota.

Discutir derechos y políticas

La noche ya estaba cerrada cuando tuvo su momento el historiador y docente Ricardo Daniel Fuentes, cuya mirada hace décadas que se posa en el devenir de los barrios barilochenses y las trayectorias de los sectores populares, en abierta contraposición con las narraciones hegemónicas que todavía conciben a los orígenes de Bariloche como exentos de contradicciones y conflictos. “Discutir la identidad de la ciudad es discutir derechos y políticas públicas”, redondeó el expositor.

En 2014, Fuentes publicó “El descuartizador de Bariloche”, un libro que se relaciona íntimamente con los saqueos de dos años antes. Su intención fue aportar “otro tipo de fundamento” para discutir “la cantinela blanca, occidental y militarista” que explica el surgimiento de la “Suiza argentina” y otras miradas de esta ciudad, que “siempre pretende ser lo que no es. Ya en 1884, de 17 asentamientos que había, al menos 15 eran de mapuches”, ilustró el historiador.

Fuentes también fustigó el estigma de los barrios altos, donde viven “eternos recién llegados” y atacó a varios de los medios de comunicación, que renuevan a diario los mensajes discriminadores. Todavía faltaban un par de horas para que finalizara el primer Encuentro del Libro y Sonidos Independientes, pero las palabras igualmente libertarias seguían circulando. Bastante más que una feria de discos de punk rock.

Te puede interesar
Ultimas noticias