Irán a juicio por la muerte de Julieta Uriarte

Dos médicos irán a juicio tras ser acusados por haber actuado con negligencia en la atención de la estudiante Julieta Uriarte, oriunda de Gonzáles Chaves, provincia de Buenos Aires, durante su viaje de egresada en la ciudad. Según la acusación, no le prestaron la atención debida, permitiendo que agravase el cuadro que padecía y que ocasionó su deceso.

El juez Gregor Joos aceptó la acusación que plantearon de manera conjunta la fiscal Betiana Cendón y el abogado querellante Rodolfo Rodrigo y habilitó el juicio contra los médicos Marisa Figueredo y Rodrigo Andrada que enfrentan cargos por homicidio culposo, luego de la muerte de Julieta Uriarte. La acusación debió ser consensuada y mereció un álgido cruce de opiniones, aunque finalmente la parte querellante abandonó la figura del dolo eventual que pretendía atribuirle a los acusados y aceptó sostener la acusación por un delito culposo.

La diferencia en la calificación le hubiese permitido a la parte querellante reclamar una pena mayor para los galenos. No obstante, el abogado adelantó una pretensión punitiva cercana a los cinco años de prisión, por lo que también dentro de la figura escogida, podría solicitar una pena de prisión efectiva, tal parece ser su voluntad.

Figueredo es defendida por el abogado Luis Terán Frías (h) mientras que Andrada es patrocinado por el abogado Sebastián Arrondo.

Superada una primera instancia de discusión en la audiencia de control de acusación y unificadas las teorías acusatorias, el juez Gregor Joos aceptó la remisión del caso a juicio, convocando un tribunal colegiado para desarrollarlo. Ahora será la Oficina de Gestión Judicial la que deberá fijar la fecha en el calendario de audiencias.

Paralelamente, las partes no lograron un acuerdo sobre la base probatoria que será rendida durante el juicio, aunque sí acordaron que ninguno de los involucrados se opondría a los requerimientos de testigos de las otras partes. Por lo que, aunque se espera que se trate de un juicio con una importante cantidad de testigos, más de veinte, en función de que en el nuevo sistema procesal no está permitida la incorporación por lectura, por ejemplo de informes médicos, por lo que todos los médicos que practicaron exámenes en el caso, serán citados a declarar.

El hecho investigado ocurrió el 6 de octubre de 2015, cuando la adolescente Julieta Uriarte murió en la habitación 247 de un hotel céntrico, tras padecer varios días un cuadro patológico que no fue detectado por los médicos que la asistieron, pese a los reclamos que realizaron constantemente sus compañeras de habitación. El caso se había tramitado bajo el viejo sistema Procesal Penal y tuvo varias idas y vueltas, por el intrincado laberinto de la Justicia.

Mariano Colombo