TRES FECHAS EN BARILOCHE E INTENSA GIRA POR LA REGIÓN

| 28/01/2019

Mel Miska presenta “Inevitable ser”

Adrián Moyano
Mel Miska presenta “Inevitable ser”

La joven cantautora dará a conocer la música que contiene su álbum, ya disponible en plataformas digitales. Soul, pop y canción con letras “muy antropológicas”, según definió la futura doctora en la especialidad.

Mel Miska presentará de manera intensiva “Inevitable ser” en Bariloche y la región. Su apretada agenda comenzará el viernes a las 21 en La Llave, continuará ocho días después en Espacio Arte y finalizará en Raíces, el 10 del mes que entra. En ese lapso, también habrá presentaciones en San Martín de los Andes (7 de febrero) y en Villa La Angostura (el 8). Luego, por compromisos académicos, la música se ausentará por varios meses de esta ciudad. Después, no diga que no sabía…

El álbum ya está disponible en plataformas digitales. Su concreción surgió “a partir de la decisión de encontrar un productor artístico que arreglara mis canciones y las embelleciera”, justificó Miska. “Pasaron por un filtro, siguen siendo canciones, pero se transformaron y reforzaron por todos lados… Instrumentalmente, en sus partes y en los acentos”. Asumió el desafío “(Iván) Roy (Valenzuela), que también es el bajista, un músico de gran trayectoria y muy activo en la escena musical argentina. Su género es la música del Litoral, pero se viene expandiendo y acompaña la producción de muchos artistas. De hecho, mi música es pop, soul y canción, pero pudo hacerlo muy bien”, ponderó la cantautora.

La barilochense asoció el proyecto de registro a su decisión de “seguir mi proyecto de manera más solista, cuando antes venía con banda… Me pareció hacerlo así para estar más organizada a la hora de tomar decisiones, de grabar y demás. El Plan A era rearmar una banda, ir al estudio y empezar a grabar, pero eso requiere de un proceso que quizás, es más lento y las decisiones son más colectivas. Es genial, pero cuando querés llegar a un producto -en el mejor de los sentidos- más definitivo, también es necesario alguien externo que pueda tener otra percepción y entender cuál era mi idea. Él (el productor) entendió que era la canción lo que tenía que estar al frente, más allá de un arreglo de guitarra o de vientos. La canción y el mensaje, porque a eso apunta mi música. Dije: Ok, va a seguir siendo mi proyecto y mi canción. Pero no sola”, historió Miska.

Después de la etapa del laboratorio, “ahora llega la música viva, una parte que para mí es hermosa. Toda la cosa fina de decisión que en el estudio se toma con más tiempo, en vivo tiene que suceder ahí, es algo espontáneo, aunque obviamente, con ensayos previos. Ahora se rearma la banda, vienen dos músicos de los que grabaron: Roy y Patricio Beratta (batería). De acá me acompañan músicos amigos: Juan Simonin en guitarra y Pipo Reyes en teclado. También va a estar Santiago Curruman en saxo como invitado en La Llave. Son músicos sesionistas que la tienen re-clara y conocen las canciones”, avisó.

Fuera de aquí

Buena parte de la trayectoria artística de la barilochense no se desenvuelve en su ciudad. “Al pasar parte de mi tiempo en Buenos Aires, sucede allá, con músicas amigas, en distintos ciclos o shows. En los últimos tiempos, en el proceso del disco, estuve más guardada en cuanto a los vivos, porque el estudio requiere un momento introspectivo. Pero mi escena se reparte entre Buenos Aires, Bariloche y México, porque donde una esté surgen la música y las redes de interacción”, confió la joven artista.

Precisamente, para terminar con su doctorado en Antropología, Melisa Cabrapán (el nombre que figura en su DNI), estará en el país de Norteamérica por espacio de cinco meses. De ahí el carácter intensivo de la gira que se viene: “Van a ser 10 días con siete fechas. Nos vamos a hacer trabajar (sonrisas), en Bariloche, Villa La Angostura y San Martín de los Andes. La gira se llama Conciertos Sures y tiene que ver con eso: si bien vamos a presentar el álbum ‘Inevitable ser’ más alguna canción nueva, la impronta es recorrer esos sures que son diversos, aunque estemos a tres horas. San Martín tiene otra estética, otros lugares y Villa La Angostura también. Entonces, la idea es mostrar el álbum, dándole matices según el espacio donde esté sonando”, adelantó.

Más allá de su identificación genérica en el pop y el soul, Miska definió que su música “lleva a cierta melancolía o sensibilidad. No a la melancolía como bajón, sino a una sensibilización”, aclaró. “Cada canción recorre un estado, que puede ser de alegría o felicidad, pero también de nostalgia, tristeza o distintos procesos que atraviesan nuestras vidas. Siempre va ahí, con alguna nota o palabra puesta a sensibilizar. La música es un lugar de transmisión y de llegada masiva, entonces es muy importante qué se dice y cómo se dice”, consideró. Una tarea de cuidado.

Entre las canciones y los artículos

Futura doctora en Antropología, Melisa Cabrapán consiguió relacionarse de buena manera con Mel Miska, la artista. “En el último tiempo pude encontrar una relación de manera más armónica, porque siempre pensaba que no, que la antropología es muy racional, estructurada y requiere de conceptualizaciones que poco tienen que ver con la inspiración, menos pensada. Después te das cuenta que no es tan así, aunque la música es el lugar más de lo abstracto, lo que surge y demás. Ahora pienso que es el mismo camino de escritura, de transmitir y de retomar procesos sociales, porque mi música es muy social”.

En efecto, las creaciones de la joven música “hablan de las mujeres, de los grupos que están en condiciones de desigualdad y entonces, desde ahí es súper antropológica mi música”, definió. “Y mi antropología intenta ser un poco más poética y humana, más sensible desde los temas que trabaja. Entonces, hoy sí puedo decir que están recontra relacionadas, aunque en una escribo en forma de canción y en otra, en forma de artículo”, estableció.

Adrián Moyano

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