Paro docente: Gobierno desestima convocatoria a paritarias sectoriales

En medio de un paro docente a nivel nacional, el Gobierno ha descartado la posibilidad de convocar a una paritaria del sector, argumentando que es una cuestión que debe ser solucionada por las provincias.

Manuel Adorni, vocero presidencial, declaró en conferencia de prensa: "Entendemos y seguimos transmitiendo que este es un país federal y que dentro de las cuestiones que deben resolver las provincias está la docente y, en este caso puntual, del salario docente o del ingreso de los trabajadores de la educación". El Gobierno, al menos por el momento, no tiene prevista ninguna convocatoria.

Esta postura del Gobierno ha generado descontento entre los gremios docentes, quienes exigen la convocatoria a una paritaria nacional, la restitución del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), un incremento del presupuesto educativo y aumentos a los jubilados docentes.

Además, los gremios reclaman financiamiento para las escuelas y universidades públicas, recursos para infraestructura escolar, fondos para comedores escolares y la reincorporación de todos los trabajadores despedidos en las áreas educativas de la Nación. También se oponen al traspaso de las Cajas Provinciales a la Nación y a la modificación de los régimenes jubilatorios docentes tanto nacionales como provinciales.

El Gobierno, a través de Adorni, expresó su sorpresa por la actitud hostil de algunos representantes gremiales y recalcó que cada provincia es responsable de la educación en su jurisdicción. Ante el paro docente, Adorni aseguró: "Si quieren hacer paro no podemos hacer nada". Sin embargo, los gremios están firmes en sus reclamos y el paro de 24 horas afecta a todos los niveles del sistema educativo.

Mientras tanto, la comunidad educativa a nivel nacional espera por una solución que permita no solo garantizar el derecho a la educación de los niños y jóvenes, sino también dignificar la labor de los docentes y mejorar las condiciones de enseñanza en las escuelas del país.

La falta de una convocatoria a paritarias por parte del Gobierno pone en evidencia las diferencias y tensiones entre las necesidades del sector docente y las posibilidades y prioridades gubernamentales.