La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó que las pequeñas y medianas empresas (pymes) del sector manufacturero en Argentina han sufrido un duro golpe en el primer trimestre del año, registrando una caída del 19,1% en comparación al mismo periodo del año anterior. Estos datos se desprenden del ͍ndice de Actividad Industrial Pyme (IPIP) elaborado por la CAME.

Durante el mes de marzo, las pymes industriales experimentaron una disminución del 11,9% en su actividad en comparación al mismo mes del año pasado. Esta situación se agrava considerando que la capacidad instalada de estas empresas apenas llega al 70%, lo que evidencia un bajo uso de los recursos productivos y una falta de inversión. Además, según la CAME, el descenso del 3,4% en la comparación mensual desestacionalizada muestra la gravedad de la situación y la urgencia de tomar medidas para revertir esta tendencia.

La crisis en el sector se refleja en altos niveles de stock y en la dificultad que enfrentan las empresas para reponer sus inventarios. Según el relevamiento de CAME, un 25,3% de las pymes consultadas señalaron tener problemas en este aspecto. Por otro lado, muchas empresas se encuentran en una encrucijada entre continuar produciendo para no cesantear personal o frenar la producción debido a la baja demanda, lo que lleva a un punto muerto en la industria.

En cuanto a los sectores específicos dentro de las pymes industriales, cinco de los seis tuvieron variaciones negativas en comparación al año anterior. Los más afectados fueron “Papel e Impresiones” con una caída del 27,4% y “Químicos y plásticos” con una disminución del 20,7%. Por su parte, el sector de “Textil e indumentaria” fue el único que registró un aumento del 10,9% en marzo, aunque en el acumulado del primer trimestre su crecimiento fue mínimo, llegando solo al 2,3%.