En un difícil contexto financiero que agobia al país y a todas las provincias, Río Negro no es un caso aislado y la austeridad es un patrón común que se demandará en este período.

En este sentido, Radio Noticias conversó con el ministro de Gobierno provincial, Federico Lutz, quien se refirió a las arcas del Estado: "La Provincia empezó con una situación financiera por sobre lo que habían sido las previsiones del flujo presupuestario 2023, donde estimábamos un stock de deuda de 8 mil millones de pesos y terminamos consolidando un inicio de gestión con una deuda de 31 mil millones de pesos".

En esa órbita, mencionó que el gobernador Alberto Weretilneck tiene la mira puesta "en una rápida recuperación de las problemáticas de salud, seguridad y educación, y luego la recomposición de la trama productiva de la provincia".

"Lentamente, hemos ido cubriendo las metas, restablecimos los servicios en los hospitales y apoyamos fuertemente la política del IPROSS para garantizar la atención a todos los afiliados y el fondeo para las prestaciones", indicó y añadió: "Restablecimos el mantenimiento de las escuelas y los convenios escolares".

Por otro lado, el funcionario provincial señaló que queda pendiente la renegociación de los salarios con los agentes públicos, "que nos genera una enorme preocupación y es la prioridad de hoy en la agenda del gobernador y de todo su gabinete".

Para Lutz "el gobierno en su totalidad está con la máxima de las predisposiciones, tratando de explicar el por qué de las ofertas paritarias, tratando de estar siempre en el techo de sus posibilidades y tratando de garantizar el objetivo de que todos los trabajadores rionegrinos reciban sus salarios, que sean dignos y que no haya un sobre endeudamiento".

“"Lamentablemente, el principal obstáculo ha sido la retracción del gobierno nacional en materia de aplicación de los fondos federales que se distribuían en la provincia como los fondos destinados a los docentes", amplió.