Falleció el joven que quiso robar cables de alta tensión de Rosario y terminó con el 90% del cuerpo quemado. Se había metido en una zanja abierta de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) y sufrió quemaduras graves.

El hecho ocurrió el domingo poco antes de las 20 en la ciudad de Rosario. El chico, identificado por la policía como Ezequiel Francisco Curaba, de 21 años y en situación de calle, se había metido en la zanja para robar los cables cuando recibió una descarga eléctrica.

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Tras el incidente, debió ser derivado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (HECA). Se informó que ingresó con el 90% del cuerpo quemado y se encontraba en terapia intensiva, intubado, con soporte vasopresor, en estado crítico y con custodia policial.

Según había informado esta mañana la subdirectora del centro de salud, Laura Taljame, los órganos vitales del delincuente habían empezado a fallar como consecuencia de la descarga. “Es increíble que este chico esté vivo”, había dicho a Radio 2.

“La piel está quemada y adentro, sus órganos se inflaman y empiezan a fallar. Está conectado a un respirador porque tiene los pulmones inflamados”, había agregado. Tiempo después, en el mediodía de este martes, confirmaron que murió a causa de las graves heridas.

Por su parte, el hermano, un hombre de 34 años, cómplice del robo, resultó ileso y fue detenido por la Policía. Quedó alojado en la Comisaría N° 32, ubicada en barrio Godoy, en la zona oeste de Rosario.