Minutos después de la apertura de la Panadería del Cerro, ubicada en Pasaje Gutiérrez al 3000, un delincuente simuló estar interesado en la adquisición de panificados, extrajo un arma con la que intimidó a la empleada y sustrajo dinero en efectivo y un teléfono celular.

El propietario del comercio expresó su indignación por el caso y por el accionar deliberado del individuo, quien actuó con el rostro descubierto, en un sitio de importante afluencia de personas.

De acuerdo a los datos que aportó, el malviviente amenazó a la empleada que atendía el comercio, quien optó por no resistirse y acatar el pedido del maleante.

Una vez que consiguió el botín y antes de retirarse, el ladrón amenazó a la víctima con volver si es que ella atinaba a reaccionar.

El caso derivó en un expediente judicial que personal de la Comisaría 28 elevó al fiscal de turno, César Lanfranchi.