Créditos para trabajadores: ¿cuánto se termina pagando de los $400.000?
El Gobierno ofrece un subsidio directo a través de créditos para trabajadores.

El Gobierno implementó una medida que ofrece créditos para trabajadores en relación de dependencia, con el objetivo de compensar los efectos de la inflación. A través de este financiamiento, se estima que los tomadores de crédito recibirán un subsidio directo de aproximadamente el 30% del crédito.
Esto implica que los trabajadores podrán acceder a una tasa de interés fija del 50% y, si se tiene en cuenta la proyección de inflación para los próximos doce meses, el valor presente de las cuotas es más favorable que el valor descontado por inflación de lo que tendrán que abonar.
Teniendo en cuenta una previsión de inflación del 150% para los próximos doce meses, aquellos que tomen un crédito de $400.000 terminarán pagando aproximadamente $280.000. Esto significa un beneficio de $120.000, que equivale al 30% del crédito.
Si los ingresos de los trabajadores en relación de dependencia acompañan la inflación, podrían encontrarse con un excedente de dinero al final del período. Sin embargo, es importante destacar que este crédito, si bien puede resultar beneficioso, implica un endeudamiento para las familias y puede ser un paliativo para aquellos sectores medios o medios bajos que ven impactados sus ingresos debido a la inflación acelerada.
En este sentido, este subsidio directo podría compensar el incremento de precios en productos básicos y permitir afrontar los gastos de consumo. Además, para aquellos sectores no afectados por la inflación, el crédito podría generar un alivio en la falta de liquidez o en la incertidumbre electoral. Estas medidas también podrían impactar positivamente en el nivel de actividad económica y ser una especie de sostén a corto plazo ante el efecto recesivo de la devaluación y la inflación acelerada.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que una posible consecuencia de esta medida podría ser la fuga de fondos hacia la compra de dólares. Aquellas familias que no tengan conflictos en materia de consumo y no estén planeando adquirir bienes podrían canalizar los beneficios de este crédito hacia el ahorro.