Comenzaremos preparando la crema. En una jarra alta echar todos los ingredientes, las yemas, la leche, el azúcar, la harina fina de maíz y la vainilla. Batir con una batidora hasta que se hayan integrado y no queden grumos. Pasar la mezcla colándola a un recipiente apto para el microondas.
Poner tres minutos a 800 w de potencia. Abrir, remover con unas varillas y volver a poner dos minutos a la misma potencia. Sacar del microondas, remover para dar cremosidad. Cubrirla con un film de cocina pegado a la superficie para que no se produzca condensación de agua y cuando se temple pasarla a la nevera. Reservarla en frío mientras que preparamos la masa del pastel.
Para la masa del pastel. Precalentamos el horno a 180 grados centígrados y ponemos a remojar en agua tibia las pasas en un bol. En otro bol batimos con unas varillas los huevos con la sal, el extracto de vainilla y el azúcar hasta que espumen y doblen su volumen. Añadimos con cuidado el aceite de girasol, la leche tibia y removemos para integrar.
En otro bol tamizamos la harina junto el polvo para hornear y la agregamos en dos veces a la masa anterior. Con una espátula la integramos suavemente.
Engrasamos con un poco de spray desmoldante o mantequilla fundida un molde desmontable de 22 centímetros de diámetro.
Pelamos y picamos una de las manzanas en pequeños dados y los integramos en la masa. Vertemos la masa en el molde y alisamos la superficie. Por otra parte metemos la crema pastelera en una manga y hacemos una espiral gruesa de crema por toda la superficie. escurrimos y secamos las uvas pasas hidratadas y las disponemos entre la crema.
Cortamos la otra manzana en láminas finas con la piel y las colocamos haciendo forma de flor por encima de la crema. Batimos la yema con las dos cucharadas de leche y pintamos la superficie de las manzanas con esta mezcla.
Horneamos con calor arriba y abajo durante 50 minutos. Una vez cocido el pastel, lo dejamos enfriar y decoramos con azúcar glas.