Esta tarde, de 17 a 19, se producirá una charla debate por el caso Lucio, en Moreno 370, primer piso. Participarán Ramón Dupuy (abuelo del pequeño) y Silvia Gómez (abuela), la abogada Agostina Portela, Fabián Cruciani, presidente de la ONG padres de Río Negro y Neuquén, y Danisa Raiteri, referente en Bariloche de la organización mencionada. “Nosotros hicimos una promesa a Lucito el día 28 de noviembre del 2021, decidimos con mi familia, con mi señora, con mis hijos, hacer algo por la problemática de la niñez que hoy en día en Argentina es complicadísima”, indicó Rubén. 

El Gobierno nacional promulgó el miércoles 3 de mayo 2023 la Ley 27.709 -conocida como Ley Lucio-, para prevenir las violencias y abusos en la infancia. Lucio Dupuy tenía 5 años cuando falleció en el Hospital Evita de la ciudad de Santa Rosa, La Pampa, el 26 de noviembre de 2021, tras recibir una fuerte golpiza. Vivía en un departamento con su madre, Magdalena Espósito Valenti, de 24 años, y su pareja, Abigail Páez, de 27, quienes fueron consideradas culpables de su muerte por el Tribunal de Audiencias de Santa Rosa, y condenadas a prisión perpetua.

El abuelo señaló a través del programa “Chocolate por la Noticia” que se emite por El Cordillerano radio (93.7) que “nos pusimos la mochila de la niñez al hombro y tratamos de sobrellevarla, trasformamos nuestro dolor en lucha, no queremos que lo que pasó con Lucio suceda en otras familias, que nadie pase lo que nosotros hemos pasado” y agregó que “entonces decidimos a través del dolor luchar y recorrer el país para que se produzca la adhesión a la Ley Lucio, que es necesaria para que no pase lo que le pasó a Lucio”. 

Asimismo explicó que “la Ley se armó en la mesa de mi casa con un legislador pampeano en base a lo que le pasó a Lucito, esto no le debe pasar a ningún niño en nuestro país. Esos sucesos son puntos muy claros dentro la Ley, llevamos una estadística desde noviembre 2021 porque hasta el da de la fecha hay 96 chicos muertos más, asesinados. Con esta ley se puede dar un amparo a los niños que tiene vulnerados sus derechos”.

Contó Rubén que “recibimos alrededor de 30 mensajes por día donde nos piden auxilio, socorro y allí el Estado debería estar presente. Nosotros hacemos lo necesario para ayudar a quienes lo necesitan”. 

A su turno, Fabián Cruciani consideró que “nuestra ONG tiene casi 10 años desde su creación. Trabajamos en todo lo que le pasó a Cristian, el papá de Lucito, y a su familia, donde no hubo una resolución de conflictos. Dentro de la sexta gira que la ONG organiza hoy estamos en Bariloche, mañana en Zapala, el miércoles en Neuquén (capital), luego en Valle Medio, en SAO, el viernes en Viedma y el sábado en Bahía Blanca. La gira intenta debatir para explicar la problemática, hay poca empatía y tuvimos que esperar que ocurra este lamentable hecho, este trágico suceso para que la sociedad despierte y vea que los excesos en los vínculos matan. A eso venimos a concientizar a la gente, que se acerquen aquellos que tengan esta problemática que vamos a tratar de ayudarlos. Además se trabaja para que las provincias adhieran a la Ley Nacional”.

La abuela Silvia dijo que “nosotros estamos en esta lucha hace un año y medio, desde el día uno comenzamos a querer cambiar un poco el sistema, ya que nos han dado la espalda en el caso nuestro y pasó lo que le pasó a mi nieto. Queremos transformar este dolor en lucha, cada 26 hacer una marcha, pedir justicia, pedir por el juicio justo, por la Ley, así hemos transitado todo este tiempo. Hoy la Ley está ya promovida en Diputados y en Senadores y estamos pidiendo que todas las provincias adhieran. Que los diputados entiendan con la mano en el corazón que esta ley no tiene banderías políticas. Solo estamos viendo por lo niños, ellos no tienen voto, lo nuestro es una lucha por los chicos”. 

Retomó conceptos el abuelo Ramón al decir: “Hay fallas en todo, en Salud, en Educación, en Justicia, en Judiciales, fallan los jueces, en Niñez, en las unidades locales o en la SENAF, hay fallas en todo. Hay que ser muy cruel al ver sufrir a un chico y mirar al costado, como se hizo con Lucio. Él entró 5 veces hospitalizado en menos de 3 meses, con quebraduras, quemaduras de cigarrillos, mordeduras, desvanecido. Lucito hacía dibujos sin ojos y sin piernas, porque realmente los dibujos expresaban los pedidos de auxilio que hacía Lucio en ese momento, sin ojos por algo que no quería ver y que le estaban haciendo y las piernas producto de los abusos, de las vejaciones que le estaban haciendo. En general en el caso de Lucio fallaron todos”. 

Sobre la responsabilidad de la jueza refirió que “sostengo que la tercera asesina de Lucio es la jueza Ana Clara Pérez Ballester del Juzgado N° 1 de Menores de La Pampa, porque el expediente de Lucio tenía solamente dos hojas, ella podía haber abierto esas dos hojas, leído esas dos hojas y se debería haber dado cuenta por las pruebas que había en esas dos hojas, de los chats, sobre las cosas que hacían con Lucio y realmente se tendría que haber dado cuenta por las pruebas que había y no sacarle la tenencia que tenía mi hijo mayor y revincularlo con la progenitora. No hizo nada, no hizo una pericia psicológica porque ella (la progenitora) estaba en tratamiento psicológico, no preguntó a dónde lo iban a llevar, a ella la costaba asumir su rol de madre, la jueza no hizo nada. Acá hubo 'ideología de género' y a Lucio lo entregaron en bandeja de oro”. 

Por último, Silvia Gómez sostuvo que “Cristian (su hijo) hoy sigue con tratamiento psicológico, medicado, queriendo salir contenido por la familia, por la gente que nos acompaña. Comenzó nuevamente a trabajar, tiene dos hijas. Estamos como cada padre, luchando, él no vive con nosotros, nuestros hijos tienen sus matrimonios conformados, pero nosotros como padres, aun cuando los chicos son grandes, estamos para protegerlos”.