En diciembre de 2022 El Cordillerano dio a conocer una información que, hasta ese momento, era un secreto entre pocos: la existencia de un grupo de personas con una confianza plena en la palabra de una mujer a la que denominan “María Nieves”, que dice hablar con la Virgen de las Nieves.

En aquella ocasión, se informó que dos veces al año realizaban acciones sobre la gruta ubicada sobre la Ruta Provincial 82, cerca del cruce al cerro Catedral.

Las fechas: el 25 de marzo, cuando llevan a cabo un vía crucis, y el 9 de diciembre, jornada en que se hace una peregrinación y rezan el rosario.

Ambos días, de acuerdo a lo informado por integrantes de la agrupación, fueron señalados por la Virgen a “María Nieves”.

El 25 de marzo es el día en que se celebra la Anunciación, es decir, cuando el ángel Gabriel se le presentó a María y le dijo que iba a concebir al Hijo de Dios.

El 9 de diciembre, en tanto, se recuerda la ocasión en que, en 1531, Juan Diego, un aborigen de cincuenta y siete años, presenció la aparición de la Virgen en lo que hoy es México, lo que fue el germen de la construcción de la Basílica de Guadalupe.

Como el último sábado fue 25 de marzo, se llevó a cabo el que denominaron “Vía crucis del Amor”.

La idea era que “María Nieves” estuviera en el lugar, pero, dado que cargaba con un problema asmático, se comunicó vía telefónica desde Buenos Aires, y así transmitió el mensaje que, según los fieles, le indicó la Virgen.

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De acuerdo a “María Nieves”, la palabra recibida decía: “He bajado del cielo por amor a mis hijos, porque soy la Madre del amor, la Madre del mundo, la Madre de los dolores, y vengo a sanar sus dolores y aflicciones. En este lugar, en este santuario, yo bendigo especialmente a mis hijos enfermos, porque este lugar ha sido elegido por el Padre que está en el cielo. Es el faro de luz que ilumina al mundo y ustedes son la esperanza de Dios. Yo, en este momento, derramo bendiciones sobre cada uno de ustedes, porque es por medio de ustedes que mis hijos conocerán el amor de Dios. Yo me compadezco de sus dolores, pero no teman, hijos míos, porque yo estoy aquí, en medio de ustedes, y he venido a traerles gracias de sanación, amor, paz y bendiciones. Sé que muchos de ustedes están sufriendo un gran dolor que tienen en el corazón, dolor de la enfermedad, de la pérdida, del abandono, de la desesperanza y del cansancio. Sé que el mundo está en una oscuridad, porque ha perdido la esperanza. Yo soy la Madre de la esperanza, hijos míos, oren para tener fe, para que puedan sentirme en sus corazones, porque si ustedes creen en Dios y confían en Mí, verán las grandezas del Señor y cantarán junto a mí el Magnificat, porque mi Dios hace maravillas en quienes confían en Él. Si ustedes se acercan a mi corazón y viven mis mensajes, conocerán el amor de Dios y serán felices para siempre, porque sólo el amor de Dios los hará felices para siempre, porque yo soy la Madre del amor y vengo a traerles el amor de Dios. Hija mía, pasen la Cruz uno a uno, que la besen y yo estaré bendiciendo a cada hijo que lo haga”.