A diferencia de lo que sucedió el 8 de marzo, cuando se conmemoró el Día de la Mujer y se notó cierto distanciamiento entre las columnas que participaron, el 24, jornada de la Memoria por la Verdad y la Justicia, se apreció unidad ante la convocatoria, sobre todo en el arribo al Centro Cívico, donde los manifestantes convergieron sin inconveniente y la mayoría se quedó a escuchar a quienes hablaron sobre el escenario dispuesto para la ocasión.

Igualmente, llamó la atención la decisión de partir desde lados distintos.

Así, se anunció que, en apoyo a las detenidas por el desalojo de Villa Mascardi, estaba la opción de salir de la ruka (casa mapuche) barilochense, donde esas mujeres se encuentran, en la calle Cabo Campos, en cercanías de Radio Nacional, a unos pocos metros de la avenida 12 de Octubre.

Pero, también, se indicó la posibilidad de arrancar desde Onelli y Brown, punto habitual de todos los años. Y fue en ese sitio donde se apreció mayor convocatoria.

Luego, también, en Onelli, pero a la altura de Moreno, esperaba una parte importante de gente.

Desde la ruka, finalmente, partió un grupo importante, pero menor en comparación a la columna mayor que se hizo notar desde el Alto.

Ante cualquier duda acerca de que hubiesen existido posiciones encontradas, Germán Schartz, integrante de HIJOS, expuso: “A las barriadas, que participan mucho de la marcha del 24 de marzo, se les hacía difícil ir a la ruka por una cuestión de transporte, por lo caro que es y lo mal que funciona –encima en un feriado–, por lo cual, atinadamente, propusieron salir como lo hacen siempre, desde Onelli y Brown”.

De esa forma, aclaró que quienes arrancaron en aquel sitio no lo hicieron en oposición a la causa de las integrantes de la lof Lafken Winkul Mapu, que se encuentran con prisión preventiva domiciliaria en la ruka, desde donde escogieron salir algunas agrupaciones, como, precisamente, HIJOS.

En ese sentido, Germán explicó el motivo por el que el grupo que integra decidió iniciar el trayecto allí: “Fue para resaltar y que se vea lo que está pasando con los pueblos originarios. En Bariloche hay cuatro mujeres detenidas junto a sus hijos, y decidimos hacerlo notar, repudiar lo que hace el Estado nacional”, señaló, a la vez que opinó que esas mujeres “no deberían estar presas si se tiene en cuenta los delitos que se les acusan”.

Como para que estuvieran conformes tanto quienes querían empezar en el Alto como aquellos que tenían la intención de arrancar en la casa mapuche fue que se decidió hacerlo de ese modo: “En la reunión que mantuvimos para organizar la marcha éramos más de treinta agrupaciones de todo tipo, políticas, sindicales, partidarias… y se propuso hacerlo de esa manera”, indicó.

En cuanto a la posición de HIJOS, expuso: “Este año partimos desde la ruka porque quisimos visibilizar la cantidad de presos políticos que existen, no sólo en la Argentina, sino en toda Latinoamérica”.

“Tenemos que hacer un quiebre en eso de que el Estado ponga presos a quienes luchan”, opinó.

Foto: Matías Garay.

Germán, además de ser parte de HIJOS, integra la Multisectorial contra la represión y milita en Convocatoria Segunda Independencia.

Es hijo de Julio César Schartz, secuestrado durante la última dictadura, quien permanece desaparecido.