El actor hizo un repaso de su vida en Luzu TV y obviamente que hizo hincapié en el más oscuro de todos sus momenos, la droga y contó como pudo salir adelante.

Para aquellas personas que tienen alrededor de 40 años, Gastón Pauls es uno de esos actores que los atravesó si se trata de hablar de televisión porque él era, además de un joven carilindo, estaba siempre envuelto en éxitos televisivos partiendo desde Montaña Rusa en la década del 90.

La fama, la buena vida, las puertas abiertas y otras cuestiones lo fueron llevando a otro mundo a Gastón, a otros sitios donde la oscuridad está disfrazada de luz y todo es efímero en el mundo de la adicción. Todo es hermoso, pero dura poco y ese no querer que termine es un tobogán derecho al vacío.

Pauls estuvo en Luzu TV visitando el programa de Antes que nadie, conducido por Diego Leuco, Mica Vázquez y Yoyi Francella y allí dejó un tendal de frases interesantes con respecto a su lucha contras las drogas y contó cómo pudo salir adelante con esa enfermedad de ser adicto.

"Para mi es lo más difícil de todo porque es reconocer que perdiste", comenzó diciendo Gastón sobre cuando no dio para más y tuvo que pedir ayuda porque no encontraba la salida. "Yo lo digo todo el tiempo porque paralelamente, ganás; es como que reconocés la derrota y empezás a ganar".

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"Cuando la sustancia empieza a tomar más protagonismo dentro de tu vida y dejás de hacer ciertas cosas por eso", sostuvo el actor sobre cuando se dio cuenta que era un adicto. Luego agregó: "Yo hace 15 años que no llamo al dealer, pero me sigo acordando su número".

En la actualidad Pauls entre otros proyectos, continuará con la emisión de su programa "Seres Libres", el cual conduce e irá por su tercer año al aire en Crónica TV. Desde lo familiar, en su lado B detrás de cámara, es padre cien por ciento de sus hijos Muna y Nilo, aquellos que tuvo junto a la actriz Agustina Cherri.

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Justamente la llegada de Nilo, según el actor, fue el punto de inflexión para empezar la recuperación definitiva. "Yo empecé mi recuperación el 29 de diciembre del 2007. Mis hijos nacieron en el 2009, Muna y el 29 de diciembre del 2011 como un regalo divino, llegó Nilo...un hecho que me hizo dar cuenta de las muchas cosas que me hubiera perdido si no levantaba la mano para pedir ayuda".

"Queres es poder" es una frase hecha, pero no siempre aplica, porque a veces solo no se puede y pedir ayuda nunca está de más. Las adicciones se tratan en conjunto y aferrándote a lo que más querés en la vida, tu familia. El hombre surgido de Montaña Rusa lo entendió así y hoy vive su felicidad a la par de sus hijos.

"Es muy difícil la recuperación pero yo no cambio ni el peor día de cómo estoy hoy por el mejor de los días puesto", firma Gastón Paúls.