Los muffins de chocolate blanco y frutillas son esponjosos y súper fáciles de hacer. Además, resultan perfectos para cualquier momento del día, ya sea en el desayuno, en la merienda o como postre.

Ingredientes:

Para los muffins:

100 gramos de chocolate blanco, picado

60 gramos de manteca pomada

150 gramos de azúcar

1 huevo

120 centímetros cúbicos de leche

280 gramos de harina tamizada

1 cucharadita de polvo de hornear

1 cucharadita de bicarbonato de sodio

1/2 cucharadita de sal

200 gramos de frutillas

Para el crumble:

100 gramos de azúcar

70 gramos de harina

60 gramos de manteca fría

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Elaboración:

1- Precalentá el horno a 180°C y prepará un molde con pirotines para muffins.

2- En un bol, mezclá la manteca pomada con el azúcar, y posteriormente agregá el huevo.

3- Incorporá la harina tamizada, el bicarbonato de sodio, polvo de hornear y la sal.

4- Sumá la leche y batí hasta obtener una masa homogénea.

5- Cortá las frutillas y añadilas a la preparación. Mezclá con movimientos envolventes. También integrá el chocolate blanco.

6- Para preparar el crumble, colocá la manteca fría cortada en cubitos, la harina y el azúcar en un bol. Mezclá con los dedos hasta formar un arenado.

7- Poné la masa de los muffins en los pirotines, llenando hasta 3/4 de su capacidad. Luego, colocá el crumble por arriba.

8- Llevá al horno previamente calentado y cociná durante 35 minutos, o hasta que al introducir un palillo a un muffin salga limpio. Dejá enfriar por 10 minutos y retirá del molde.