Mientras que algunas personas son muy simpáticos, les encanta saludar y mantener una sonrisa en la cara, a otros les cuesta mucho ser atentos con las personas y comenzar pláticas casuales.

Los signos más antisociables del zodiaco, si bien pueden ser introvertidos, prefieren mantener un perfil bajo pues desean concentrarse en lo suyo y no quieren que alguien interfiera en su camino. Socializan cuando es necesario hacerlo, mientras tanto, se marcan su distancia.

Escorpio

La clasificación la encabeza Escorpio, al ser gobernado por Plutón, el planeta del inframundo y los secretos, su energía es reservada. No se abren socialmente hasta que confían en las personas, por lo tanto, no esperes que sea agradable si apenas lo conoces.

Se reserva el derecho de tener interacciones casuales, esto quiere decir que no te hablará a menos que sea necesario. Por esta razón, los astrólogos dicen que son antisociales y fríos.

Capricornio

Su comportamiento es frío y antipático cuando está concentrado en un objetivo. Posiblemente distrae su atención solo si se percata que tu presencia puede ayudarlo a conseguir una meta, pero una vez que lo ha conseguido, pasa de largo.

Capricornio es un signo gobernado por Saturno, el planeta de la disciplina, por eso suele ponerse de mal humor cuando las cosas no salen como lo esperaba. Ser sociable puede ser una distracción, por eso es uno de los signos más hostiles del Zodiaco.

Virgo

Si bien son personas a quienes les encanta ayudar, su predisposición a querer tener la razón de todo hace que sea algo egoísta en lugar de ser amistoso. Es crítico consigo mismo, por consiguiente, lo es con los demás.

Ser brutalmente honesto no es una actitud que sintonice con las personas sociables, de hecho, algunos podrían considerarlo antipático, sin embargo, Virgo no lo hace con mala intención.

Piscis

A menudo mantienen una distancia emocional entre ellos y los demás porque, al ser un signo de agua bastante sensible, tiene miedo a salir lastimado.

Piscis vive en su propio mundo, después de todo está gobernado por Neptuno, el planeta de los sueños y las fantasías, por lo que a pesar de tener una aparente actitud de no importarle nada, la realidad es que le cuesta formar conexiones.