Uruguay venció dos a cero a Ghana pero no le alcanzó para la clasificación a octavos, es que quedó tercero por diferencia de gol debajo de Corea del Sur. Y si, en el Mundial de los batacazos, los surcoreanos se impusieron por dos a uno a Portugal y le arruinaron el sueño a Suarez y compañía.

La “celeste” sabía que de ganar se ponía a tiro, era su obligación no le servía un empate. Y lo fue a buscar. El DT Diego Alonso metió mano en el equipo y de entrada De Arrascaeta, el de Flamengo y arriba Lucho Suarez y Darwin Núñez. Un equipo ultra ofensivo sumados al “pajarito” Valverde y Facundo Pellistri.

A los 20 minutos la primera pálida, penal para los africanos y el murmullo se apoderó del Al Janoub Stadium. Por suerte para los sudamericanos, el arquero Sergio Rochet atajó el tiro y le devolvió el alma al cuerpo a los suyos. En seis minutos brillantes, Giorgian De Arrascaeta marcó por duplicado y Uruguay se puso arriba por dos tantos.

El resto del partido fue todo para Uruguay (salvo en los últimos minutos que los africanos fueron a buscarlo por la desesperación ajena). Dos penales que pudo haber sancionado el colegiado y uno, incluso a instancias del VAR, decidió mirar para un costado.

Uruguay cumplió, jugó un verdadero partidazo, sacando a lucir la garra charrúa que todo el mundo a esta altura ya conoce. Pero en simultáneo, Corea le daba vuelta el partido a Portugal, lo venció por dos a uno y ponía paridad en la tabla de puntos. Tanto Uruguay como Corea con cuatro puntos y cero de diferencia de gol. Pero los coreanos convirtieron cuatro goles en el certamen contra los dos de Uruguay.

Solo un gol le faltó a nuestro país vecino para meterse en la siguiente instancia. Los asiáticos se medirán seguramente contra Brasil que ganará su grupo pese a jugar con suplentes. Y Portugal esperará al segundo del Grupo G, Serbia, Suiza y Camerún, los posibles rivales.