La Fundación San José Obrero informa oficialmente que trabaja para empoderar, sanar y fortalecer a niñas, niños, jóvenes y adultos en sus derechos humanos irrenunciables. De esta manera tratan de generar confianza en las capacidades juveniles, fortaleciendo la autoestima, impulsando crecimiento intelectual, cultural, físico y espiritual, en un marco de respeto por la naturaleza, con la familia como eje (en cualquiera de sus formatos) y el trabajo como valor cultural, a través de modelos de construcción social y comunitaria. El director de la Escuela de Gestión Social Laboral, Fábrica de Futuro, Fernando Fernández Herrero, explicó que “pudimos avanzar con la Municipalidad con esta iniciativa de la escuela fábrica, es un modelo nuevo, innovador de educación mezclado con trabajo, con integración. Nosotros hablamos de educación, trabajo y familia, tres pilares y viendo el formato tradicional de educación en los barrios que no llega con las necesidades que muchas veces tienen los chicos, entonces necesitamos hacer este formato de la escuela fábrica, que mezcla el trabajo con la capacitación y con la integración a través de un fortalecimiento con la familia”.

Asimismo indicó que “muchos chicos tienen el tejido familiar muy roto entonces esto es muy necesario e imprescindible para llevar adelante una educación. En nuestra sede del barrio Malvinas venimos llevando adelante este proyecto, en los últimos dos o tres años hemos avanzado muchísimo, estamos desbordados y apretados en un lugar y a partir del año pasado empezamos a trabajar con la Comuna en base a la posibilidad de agrandar el lugar y nos dijeron que les interesaba mucho apoyar este nuevo formato”. 

A través del programa “Agenda” que se emite por El Cordillerano radio (93.7) y que conducen Antonio Zidar y Daniela Lucero, el entrevistado aseguró que “primero nos ofrecieron un terreno en el barrio Vivero que no se puede usar para la escuela porque es inundable, entonces la idea es hacer ahí la parte de las huertas, actividad deportiva y un hogar de problemática adictiva que es uno de los agujeros que tiene Bariloche, donde no hay ningún lugar que reciba a chicos con adicciones. También estamos asumiendo ese desafío”. 

Refirió que “en el terreno del barrio Omega la idea es hacer la escuela fábrica, dentro de un parque, la estamos pensando dentro de un parque, con actividad deportiva/recreativa, de entretenimientos, con la gente de la Junta Vecinal (JV). La idea es hacerla cerca de la ruta, con un monumento a las pibas y pibes de los barrios y la gente de la JV venía pensado en hacer una plaza para la mujer, entonces unimos esta idea fuerza y se hará un monumento a la Mujer de los barrios populares para homenajear a las mujeres que sostienen a sus familias”. 

Además, informó que “hoy estamos en más de 600 personas participando en la escuela-fábrica de futuro, seguramente para el año próximo estaremos hablando de 1.000 a 1.200 personas, por eso estamos pensando un edificio que contenga esa fuerza social, con un equipo en el que participan técnicos independientes, como Sebastián Ayala que viene trabajando mucho en la parte diseño, gente del Conicet, de INTA, de INVAP, del Centro Atómico, gente de INNOVA de la Provincia. Armamos un equipo que está trabajando primero en el diseño de las viviendas que va a salir de esa escuela fábrica y ahora en el diseño del edificio”. 

Por otra parte, “estamos buscando el apoyo tanto de privados como del sector público para hacer la obra. La obra la vamos a terminar de hacer de cualquier forma, siempre demostramos que arrancando con nada podemos hacer mucho. La diferencia es que con apoyo se logrará hacer antes, eso es muy importante porque nosotros trabajamos sobre la base de la vida con los chicos, con capacitación y entonces uno o dos años para este proyecto hace mucha diferencia”. 

Consideró el director que “la educación secundaria actual va a ir transformándose en este formato. En el barrio Vivero vamos a trabajar la parte de producción agroecológica, de entramados productivos tratando de articular con otras organizaciones sociales, con otras cooperativas, en la producción y distribución de alimentos”. 

Por último, Fernández Herrero sostuvo que “trabajamos siempre con el apoyo de Educación de la Provincia y tenemos nuestra potencia para ir generando energía en capital y en trabajo. Nuestros proyectos son totalmente comunitarios, todo es de todos, esto es importante porque fortalece la sociedad, ya que estamos viviendo un momento de tristeza permanente. Queremos romper la inercia que hoy tiene la falta de educación, esto es un proyecto de vida para los jóvenes, porque esos jóvenes no ven hoy en la educación un proyecto de vida y debemos generar una educación que los contenga”.